Siete barrabravas de Peñarol murieron por sicariato

"Estos grupos han pujado por el poder, y la consecuencia ha sido que de 19 personas que integran esta primera línea, siete han muerto por razones de sicariato o por ajustes de cuenta. El resto tiene aproximadamente unos 60 tipos de delitos distintos en su haber", afirmó en el Parlamento el integrante de la Comisión de Seguridad de Peñarol, César Inzaurralde.

"Esto nos está hablando claramente de que el fenómeno no es Peñarol, sino la historia de violencia de estas personas que son delincuentes habituales y peligrosos, que han tenido capacidad de organizar pandillas", afirmó Inzaurralde, según la versión taquigráfica de la Comisión Especial de Deporte del Senado que se reunió el jueves 9 de febrero.

El funcionario de Peñarol agregó que lo que ocurre en los distintos barrios con la comercialización de la droga, el hurto de vehículos y fincas, y las rapiñas "tiene la característica –aunque parezca mentira– de que durante la semana puede asociarse un barrabrava de Peñarol con uno de Nacional o de Cerro".

Además, sostuvo que los clubes "actúan como cortesanos". "Al no conocer el fenómeno, al no estar entrenados para detectar la maniobra, es fácil que esas personas se arrimen y busquen también tener influencia, de alguna forma , sobre los dirigentes, los palquistas, los contratistas o cualquier otra persona que ande en la vuelta de un club. Lo que quieren tener es el privilegio. ¿Cuáles son los mecanismos? Bastante sencillos: la amenaza y la extorsión", dijo Inzaurralde.

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