Tienda Inglesa recorta beneficios a trabajadores pero por ahora evita más despidos

Atentos a cada paso de la reestructura que planteó Tienda Inglesa desde el año pasado, los trabajadores de la cadena de supermercados aseguran que por ahora "no están en juego los puestos de trabajo".

En 2016 Tienda Inglesa cambió de manos por US$ 120 millones, pasando de ser propiedad de la familia Henderson a un grupo inversor estadounidense liderado por Goldman Sachs.

Desde entonces, la compañía afrontó una reestructura para reacomodar su situación financiera, que empezó con el despido de mandos altos y medios que ostentaban salarios elevados bajo la administración anterior. Después, la nueva gerencia ofreció determinados montos de dinero a aquellos trabajadores que optaran por retirarse. "Hubo gente que accedió voluntariamente a ese despido incentivado", explicó este martes a radio Carve el dirigente de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (Fuecys), Ismael Fuentes.

Ahora, el paso que plantea la dirección es el recorte de ciertos beneficios que ostentan históricamente los trabajadores del supermercado. El sindicato valora positivamente los esfuerzos de la empresa por no ampliar los despidos, aunque aspira a que la pérdida de los beneficios sea lo menor posible.

Entre los principales beneficios que se quitarían están un aguinaldo complementario a fin de año y una retribución que se devolvía de IRPF.

"Cuando hay una reestructura lo primero que sentimos los trabajadores es inestabilidad. El hecho de que la empresa esté planteando que en principio no haya puestos de trabajo en juego es una tranquilidad, pero recorte de beneficios tiene un impacto", afirmó Fuentes.

"Lo que logramos ahí es que no sean los beneficios que se obtienen por el convenio colectivo del sector", afirmó en rueda de prensa el presidente de Fuecys Favio Riverón.

Según la Central de Riesgos del Banco Central, Tienda Inglesa tiene calificación 4 (deudor con capacidad de pago muy comprometida) y posee una deuda con el sistema financiero de US$ 28,1 millones, informó El País.

La empresa lleva más de cuatro años reportando pérdidas en su balance y por tanto la nueva dirección entiende que la reestructura es inevitable. Pero mantiene su disposición para que esos cambios lleguen sin que se pierdan puestos de trabajo.

De todas formas, Fuentes aclaró que no se trata de un negocio fundido ni mucho menos. "Uno va a la tienda y siempre tiene que hacer cola porque está lleno".

Según explicó, "una cosa es la rentabilidad de la empresa cuando hay un dueño solo y otra cosa es cuando hay un grupo de inversión. Para una persona sola US$ 1 millón al año es mucha plata, pero para un grupo de inversión no es nada".

La plantilla de Tienda Inglesa asciende a 4.000 trabajadores en el pico zafral del verano, mientras que en invierno está en el orden de los 2.800 funcionarios, informó Fuentes.

Riverón dijo que todavía "no hay medidas previstas" por esta situación, aunque habrá asambleas en cada una de las 10 sucursales.

Además, este miércoles Fuecys parará toda la jornada (desde las 9 de la mañana). Aparte de adherir al paro parcial del PIT CNT "con Fuecys venimos reclamando por quinto año el 21 de junio como día de los trabajadores del comercio y servicios y eso puede originar que haya un número grande de trabajadores movilizándose", agregó el presidente del sindicato.