Torrente, a su servicio

Segura pasó rápidamente el pasado viernes por Montevideo, para hacer la presentación de su último filme Torrente 5: Operación Eurovegas. En palabras del director, con esta entrega dará por terminada la saga del policía guarro y racista fanático del Atlético de Madrid que comenzó en 1998: “Me gustaría parar aquí. Me ha quedado muy bien, muy redondita, muy graciosa. Me da miedo no poder superar ésta. Quiero dejar a Torrente en lo alto”, indica.

En esta ocasión, el cineasta ha decidido no guardarse nada a nivel de la producción de su película y el resultado es un obra digna de cualquier blockbuster estadounidense. En Torrente 5 hay explosiones, persecuciones en alta velocidad y la participación de una estrella de Hollywood como Alec Baldwin, quien interpreta a un extranjero que encomienda a Torrente y a una banda de personajes robar un importante casino en un golpe maestro. Para el filme, Segura no sólo decide jugar con el género de películas de atraco como La gran estafa, sino que también emprendió en realizar una crítica social a su España natal. Al salir de la cárcel, el protagonista se encuentra con una España expulsada de la Unión Europea, lidiando con el regreso de las pesetas y al borde del declive social.

“Es exagerada pero me siento Nostradamus. Hay pequeñas cosas que se están empezando a dar. En 2018 va a ser curioso volver a ver la película”, bromeó el director.

Gracias a la popularidad duradera de Torrente, un personaje amados por muchos y odiado por tantos otros, Segura se ha encontrado a lo largo de su carrera con varias sorpresas. Desde una invitación para hacer un pequeño papel en una comedia con Jean Reno (Comme un chef, 2012) hasta un recibimiento de estrella internacional en países como Hungría o Uruguay, donde en 2011 conoció el bar Torrente.

“Hay gente que lo entiende y lo disfruta mucho. Otra gente le repugna como personaje y como producto, que piensan que soy un grosero y sin modales. La suerte es que mis amigos en los que confío han sabido apoyarme y eso me alegra”, señala el español.

A futuro, el español afirma querer crear una comedia que no fuera de Torrente: “Me doy cuenta que mi filmografía es muy igual. No es que me queje, pero por curiosidad me gustaría probar otras cosas. Pero me gusta tanto ver a la gente reírse en la sala que creo que esto es mi oficio”, concluye.