Trump, mediador para la paz en Medio Oriente

El pasado 1 de mayo, Netanyahu pareció solo endurecer su retórica hacia Abas: "Si usted quiere la paz, entonces deje de pagarle a los terroristas", fue una de sus últimas declaraciones referentes al líder palestino. Sin embargo, a pesar de que no haber confirmado su presencia, Netanyahu está dispuesto a volver a sentarse a la mesa para discutir un acuerdo de paz, según informan medios israelíes. Cuando visitó Estados Unidos, Trump se mostró dispuesto incluso a no reconocer un Estado palestino, postura que ahora parece haber cambiado.

Desde la asunción Trump, la política de EEUU respecto al conflicto entre Israel y Palestina es poco clara. En principio, se hablaba de una embajada estadounidense en Jerusalén (lo que sería una afrenta para los líderes palestinos) y, aunque voceros de Trump niegan que haya abandonado la idea, lo cierto es que esa posibilidad ha sido de momento pospuesta por el presidente estadounidense. Israel incluso estaría a favor de retrasar la medida para no elevar tensiones. ¿Podrá Trump ser el eje para un nuevo acuerdo de paz? Se sabrá en poco tiempo.

Es uno de los jugadores periféricos del acuerdo por su lugar de potencia. Esta semana, el presidente Frank-Walter Steinmeier visitó Israel y se reunió con Netanyahu, aunque hace algún tiempo atrás el primer ministro israelí declinó reunirse en Israel con el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Sigmar Gabriel, debido a que este se encontró con representantes de ONG vinculadas a Palestina. Tras una reunión con Steinmeier en territorio palestino, Abas anunció que accedía a reunirse con Netanyahu.

Fue la sede de la conferencia de paz que estableció la necesidad de una "solución de dos Estados" para resolver el conflicto entre Israel y Palestina. Netanyahu aseguró que la conferencia, que incluyó a más de 70 países, era prácticamente un esfuerzo antiisraelí y "que no tenía uso ninguno". Finalmente, se supo que Netanyahu ofreció a Francois Hollande una cumbre con Abas a solas, en París, a cambio de la cancelación de la conferencia. Hollande en su momento dio a entender que Netanyahu estaba en contra del proceso de paz, pero le advirtió: "Ese tren ya salió de la estación". Ahora parece que el encuentro sí sucederá.

El rey Salman bin Abdulaziz invitó a Abas a un encuentro con Trump y líderes musulmanes en Riad, a fines de este mes. Abas accedió. La bienvenida que los saudíes (sunitas) están preparando para Trump –que incluye reuniones con líderes musulmanes de la región– no es vista con buenos ojos por otros jugadores de la región que siguen el conflicto con su propia agenda, como es el caso de Irán (chiítas).

Básicamente una vez más un enemigo declarado de Estados Unidos casi en todos los planos, esta semana Irán se refirió a las buenas migas que Donald Trump parece haber hecho tanto con israelíes como con saudíes a las puertas de su visita regional: "El lamentable régimen saudí prueba una vez más que actuará a favor de los sionistas para establecer un frente común contra Irán y servírselo en un plato dorado al presidente Trump", señaló el gobierno iraní.