"Uruguay tiene que avanzar ahora en las buenas prácticas ganaderas certificadas"

El congreso de este año tuvo como siempre los temas interesantes de trazabilidad y la posibilidad de discusión entre los distintos participantes. Registró asistentes de Panamá, Nicaragua, Colombia, Brasil y Argentina. Este año se destacó la incorporación de una jornada sobre buenas prácticas agropecuarias y bienestar animal. En ese marco tuvimos la visita de conferencistas de la certificadora europea GlobalGap, así como también de otros especialistas europeos. A nivel nacional sobresalió la presentación de una empresa certificada en el área de cítricos, así como también se presentó la nueva norma ISO en bienestar animal.

Es cierto que Uruguay tiene un posicionamiento importante a nivel mundial en materia de trazabilidad, pero no podemos quedarnos en este camino. Tenemos que seguir avanzando. Hoy la trazabilidad ya no es algo desconocido para los países productores de carne, incluyendo Latinoamérica. Todos están trabajando en la instalación e implementación de los sistemas de trazabilidad. Por lo tanto Uruguay, que ya tiene una trazabilidad madura, debería aprovecharla para avanzar en lo que son las buenas prácticas ganaderas, que significa hacer las cosas de forma correcta, de manera armonizada y según un protocolo, lo que también le va a dar una distinción al país. También debe estar referenciado a lo que es bienestar animal, no solo por ética, sino también porque los consumidores lo exigen. Por supuesto, se evitan los decomisos por algún hematoma o absceso, que los pueden provocar algún golpe o mal trato a nivel de transporte.

Hay algo que no se ve y es importante. Todo lo que se haga en contra del bienestar animal a nivel de campo, va a provocar ya sea un estrés, una infección o un hematoma que no se ven, pero que disminuyen la capacidad de desarrollo del animal. Tampoco va a ganar la misma cantidad de kilos y no va a tener la misma aptitud reproductiva. Tampoco se ven los efectos del estrés o de golpes y aplicación de una picana eléctrica en forma excesiva. Todo eso hay que demostrarlo para que los productores entiendan que aplicar el bienestar animal les va a significar una mejora de la gestión, un aumento de la rentabilidad y un mejor uso de los recursos.

Vale destacar que se está consolidando la declaración jurada anual de Dicose en forma on line, lo que permite recoger en forma más rápida todos los datos del sector ganadero y en forma más exacta. Por otro lado, se está avanzando en campañas sanitarias relacionadas con la trazabilidad. Hoy, tanto en brucelosis como en garrapata, se está trabajando en la lectura de los animales para relacionarlos con alguna actividad, como el retiro de muestras, vacunación o tratamientos contra la garrapata. La trazabilidad se está utilizando cada vez más y es bueno para el país y los productores en forma individual.

Hay dos experiencias que son muy positivas. Una está referida a la cría de carpinchos y la restante en la producción de esturiones en el río Negro.

Uruguay ya está bien posicionado en trazabilidad animal y deberá seguir actualizándose. Pero también tiene cada vez más importancia el uso de las buenas prácticas y en forma certificada. De esta manera se podrá asegurar a los consumidores la inocuidad de los alimentos, la seguridad de que se lleva un control de toda la cadena alimenticia y que puede demostrarse mediante la certificación de los establecimientos en buenas prácticas ganaderas. Lo más importante es que especialistas de la certificadora GlobapGap nos mostraron en el congreso en qué consistía el proceso para iniciar en forma lenta la adaptación del establecimiento con vistas a lograr finalmente una certificación a nivel del predio.

Efectivamente. Uruguay ya logró una certificación de carnes reconocida por el USDA de EEUU como es Never Ever 3 y también de establecimientos en bienestar animal. De esta manera estamos muy bien para avanzar a las buenas prácticas de gestión del establecimiento, que no solo generan prestigio hacia el exterior, sino que además mejora la rentabilidad de la explotación y ordena el funcionamiento de esa empresa.

Exacto. Una buena práctica agropecuaria tiene indefectiblemente que empezar por la identificación de los animales y su respectiva trazabilidad, porque no se puede medir y no se puede analizar nada que no esté identificado y que no se conozca su historia. El primer paso es tener el animal identificado y trazado, y luego el bienestar de los trabajadores y del medio ambiente, considerando que el mundo está teniendo problemas del ecosistema, de desequilibrio de la biodiversidad. Habrá que tener mucho cuidado del suelo donde estamos produciendo y fundamentalmente disponer de planes de sanidad, nutrición y reproducción que permitan sus controles, mejorar la producción y asegurar que no van a quedar residuos en los productos finales.