Vázquez y Rousseff quieren un TLC con Europa, pero lo quieren ya

Sin nombrar al vecino, los presidentes de Uruguay y de Brasil enviaron ayer sobre el mediodía una nueva señal al gobierno argentino de que avanzarán en el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el Mercosur y la Unión Europea a pesar de las resistencias del kirchnerismo. Tras la reunión de una hora que mantuvieron, Rousseff afirmó que el acuerdo es una “prioridad” en la agenda del bloque y Vázquez informó que hubo consenso bilateral para establecer “ritmos y velocidades de negociación” para los socios que no quieran entrar en el corto plazo.

“El tiempo es ahora, como lo dijo la presidenta de Brasil, queremos lograr avanzar en un acuerdo este año”, dijo el mandatario uruguayo al ser consultado por El Observador sobre si se podrá esperar el resultado de las elecciones en Argentina para avanzar.
La intención de Uruguay y Brasil es cerrar en 2015 el acuerdo comercial con la Unión Europea y el apuro es tal que a mediados de junio quieren tener una lista con los productos a liberalizar para llevar a la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).

El presidente acordó con Rousseff que dentro de “dos o tres semanas” comenzará la negociación con el objetivo de presentar “en el corto plazo” las ofertas comerciales de intercambio al bloque europeo, según dijo durante una conferencia que brindó a los medios uruguayos presentes en Brasilia.
Según informó Vázquez, será la presidenta brasileña quien negociará el tema con Cristina Fernández de Kirchner.
La meta primaria es acordar las aspiraciones antes del 11 de junio para poder presentarlas en Bruselas, Bélgica, durante la reunión que tendrán los gobiernos de Latinoamérica y el Caribe con los de la eurozona. “Propongo a la Unión Europea que definamos para el más breve plazo posible la presentación simultánea de nuestras ofertas comerciales”, dijo Rousseff.

Ayer al regreso a Uruguay, los ministros Danilo Astori (Economía) y Rodolfo Nin Novoa (Relaciones Exteriores) dieron una conferencia de prensa en la que el canciller dijo llegar “reconfortado”.
En tanto, Astori se mostró igual de contento. “El día de hoy marca un hito histórico”, expresó en relación a la posibilidad de comercio con Europa

Van para adelante
Aunque la idea es que la presentación sea de todos los países de la región, Uruguay y Brasil pretenden avanzar a como dé lugar y por eso promoverán cambios en el funcionamiento del Mercosur. Mientras el hecho representa un viejo anhelo del equipo económico liderado por Danilo Astori, la economía brasileña está en caída y tiene necesidad de encontrar nuevos mercados (ver recuadro a la derecha).
Brasil, en recesión, presentó en 2014 una balanza comercial con un saldo negativo de US$ 3.930 millones. Además la inflación a abril de 2015 se ubicó en 8,13% y el desempleo en 6,2%.

“Hoy la realidad política, económica, hace que países como Brasil estén pensando también de la misma manera en lograr una flexibilización dentro del Mercosur para avanzar en acuerdos con otras regiones u otros países extrarregión. En ese sentido hemos acordado impulsar fuertemente para este año concretar la puesta en marcha del proceso de integración comercial, o Tratado de Libre Comerio, o como se quiera llamar, entre la Unión Europea y el Mercosur”, dijo Vázquez.

Tras la reunión con el presidente uruguayo, Rousseff recibió a la directora general del Fondo Monetario Internacional, Christine Legarde. El último informe del organismo, presentado en abril, mencionó como un aspecto negativo “la baja confianza de los empresarios y consumidores en Brasil”.
La necesidad del gobierno norteño de recibir divisas es una de las razones que explica la presión que ejerce sobre el acuerdo con la Unión Europea, un tema en el que hasta hace un año prefería mirar para el costado pese a la insistencia de Uruguay.
Flexibilizar

Uruguay y Brasil están dispuestos en seguir adelante con el acuerdo con Europa aunque Argentina plantee reparos, y por eso plantean alternativas sobre los tiempos de integración, según dijo ayer Astori al finalizar las reuniones.

“Obviamente se va a invitar a Argentina a negociar, pero Uruguay y Brasil tienen una firme disposición de lograr los acuerdos a corto plazo. Lo que quedó acordado es seguir adelante aunque haya diferentes velocidades. La nuestra es esta, estamos dispuestos a aceptar que otros lleven una velocidad más lenta, pero no vamos a detenerla”, sostuvo. “Al bloque lo peor que le hace es seguir como está, sumido en la mediocridad, en la inacción”, sentenció.
Vázquez, en tanto, reiteró que “no le satisface” el actual funcionamiento del bloque regional. “Negociaremos bloque a bloque contemplando esa flexibilización, es decir que los países que estemos prontos para ir a ese acuerdo lo hagamos, y que los países que consideren que necesitan un tiempo más para avanzar que se quedan en esa situación y cuando estén en condiciones de avanzar que lo hagan de la misma manera que lo podemos hacer Brasil y Uruguay”, agregó.

Si bien no fue un tema de la reunión, otro de los temas que inquieta al gobierno uruguayo son las trabas comerciales impuestas por Argentina a los productos uruguayos. El presidente uruguayo manifestó ayer la intención de “replantear las etapas del proceso común de integración” y reconfigurar “los compromisos y obligaciones existentes”. Vázquez se fue de Brasilia satisfecho e invitó a Rousseff a visitar Uruguay. Posicionarse con Brasil como aliado, pese a su desaceleración, es la estrategia de Uruguay para ganar mercados y hacerle frente a Argentina.