Armas de fuego, drogas y 34 detenidos: el resultado del megaoperativo en Casavalle

Con un despliegue de aproximadamente 600 policías, el Ministerio del Interior realizó este miércoles desde la madrugada 68 allanamientos en Casavalle. En el operativo no hubo heridos y 34 personas fueron detenidas. De ellas, 28 estaban requeridas por investigaciones previas en curso y otras seis fueron detenidas por desacato, informó a la prensa el director de la Policía Nacional, Mario Layera.

También incautaron más de 12 armas de fuego, unas 213 municiones, más de cinco kilogramos de una sustancia blanca que podría ser cocaína, unos 800 gramos de un polvo que podría ser pasta base y 850 gramos de una yerba que podría ser marihuana. Todas las sustancias están siendo analizadas por la Policía, que se retiró de Casavalle sobre las 11 de la mañana.

El operativo, que contó incluso con un helicóptero Robinson 44 Raven II, tenía como objetivo dar cumplimiento a decenas de órdenes judiciales referidas a investigaciones a cargo de fiscales especializados en drogas, delitos complejos y homicidios.

Para ello, se dispuso el cierre total de la zona (impidiendo la entrada y salida de personas o vehículos) y también se cerró el paso departamental con "férreos controles" en la ruta de salida de Montevideo, según informó la Unidad de Comunicación del Ministerio del Interior.

Policías en moto bloqueaban en tanto la circulación de vehículos desde San Martín hacia Unidad Casavalle por la avenida Aparicio Saravia, en la zona de Los Palomares, mientras efectivos de la Guardia Republicana se adentraban en los pasajes del barrio Casavalle. También se impedía circular por la avenida Gustavo Volpe, y a quienes intentaban salir para dirigirse a sus lugares de trabajo, les era requerida la cédula.

Encapuchados, con escudos, chalecos antibalas y armados, los policías recorrieron los callejones de esa zona de Casavalle y allanaron varias de las viviendas. Eran pocos los que se animaban a circular por dentro del barrio y solo algunos vecinos esperaban a la sombra o en las paradas que terminara el operativo para poder ingresar a sus hogares.

Uno de los efectivos que participaba del operativo dijo a El Observador que en esos casos si las personas no están requeridas se los dejaba salir de la zona. Otros, sin embargo, no tuvieron la misma suerte y esperaban desde la mañana poder ingresar a sus viviendas. Fue el caso de un hombre que esperaba bajo una parada de ómnibus desde las 7 de la mañana sin poder ingresar, ya que la policía realizaba allanamientos en las cercanías de su casa.

Pese a los inconvenientes para circular, algunos festejaron el operativo. "Así como están ellos ahora, los que andan por mal camino, vivimos nosotros todos los días", contó a El Observador una de las vecinas que prefirió no dar su nombre. "Tan siquiera que los dejen con un poco menos de armas", agregó, "no es que las veamos, pero las escuchamos, sentimos una metralleta y es normal".


El ministro Eduardo Bonomi declaró a la prensa que el operativo responde a hechos que se dan cotidianamente y que si bien no tienen la "espectacularidad" del robo a la remesa en Sayago, sí "lastiman a la gente que vive en los barrios" por lo que es necesario intervenir.