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Baja la aprobación a la gestión de Vázquez
La visión de los uruguayos con respecto a la gestión del presidente Tabaré Vázquez se tornó algo más negativa en el último tramo del año pasado y dejó de ser positiva para la mitad de la población.
El 46% de los uruguayos aprueba la gestión de Vázquez mientras que el 43% la desaprueba, según la última encuesta de la consultora Factum, divulgada este viernes. El 10% ni aprueba ni desaprueba, y el restante 1% no opina.
De esta forma, la aprobación registra una caída de 4 puntos porcentuales frente a la encuesta anterior al pasar de 50% en el tercer trimestre de 2017 a 46% en el último; la aprobación se mantiene prácticamente igual –de 44% pasó a 43%–. La pregunta formulada fue: "¿Aprueba o desaprueba la actuación de Tabaré Vázquez como presidente de la República?".
"Hay una importante polarización en los juicios. Casi la mitad del país (46%) tiene un juicio positivo de la gestión presidencial. Y una parte algo equivalente, un poquito menos (43%), tiene un juicio negativo. Estos datos son claros y fuertes, que también se expresan en los juicios sobre algunos temas importantes: hay dos visiones contrapuestas de la sociedad uruguaya con fuerzas algo equivalentes", dijo en radio Universal el director de Factum, Óscar Botinelli.
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Los datos de la encuesta pertenecen al cuarto trimestre de 2017 con una muestra de 1.873 casos. Vázquez había comenzado su segundo mandato con un 78% de aprobación pero ya en el segundo trimestre de 2015 ese número descendió a 49%. En el primer trimestre de 2016 llegó a su nivel más bajo: 33%.
Con la desaprobación pasó algo similar pero a la inversa. Comenzó muy baja, en un 16%, y ahora se encuentra en su punto más alto. El caso del exvicepresidente Raúl Sendic –que terminó con su renuncia luego de un fallo adverso del Tribunal de Conducta Política (TCP) del Frente Amplio– fue el hecho que más influyó en el aumento de la desaprobación, según Botinelli.
En enero-marzo de 2016 la desaprobación de la gestión presidencial superó por primera vez a la aprobación (38% frente a 33%).
Desde la mitad de 2016 la aprobación se mantuvo apenas por encima de la desaprobación. "Desde hace casi dos años, unos siete trimestres para ser más exactos, el país queda dividido en dos partes más o menos de similar fuerza, con dos visiones distintas y opuestas: una ve bien al presidente y otra lo ve mal", concluyó el politólogo.
