El exdirigente de Peñarol Andrés "Betingo" Sanguinetti quedó preso en Andorra luego de declarar. Fue procesado por lavado de activos en el caso Odebrecht. Había viajado custodiado por dos efectivos de
Interpol para responder por
su presunta participación en el caso Odebrecht.
Según pudo saber El Observador se le descontará la prisión preventiva que cumplió en Uruguay. En la tarde de este martes ya ingresó a la cárcel de Andorra.
Entre 2006 y 2015, Betingo trabajó en la firma
Banca Privada de Andorra (BPA), que según la denuncia del exabogado de Odebrecht, Rodrigo Durán, participó del sistema de sobornos ideado por la compañía para conseguir obras públicas en buena parte de América Latina. Durán, quien colabora con la Justicia española, señaló a una decena de empleados de BPA, entre los que se encuentra
Sanguinetti.
La maniobra consistía en hacer crear sociedades a los implicados para que se hicieran pagos a través de testaferros, según informó el sitio Catalunya Press.
Según declaró Durán, Sanguinetti trabajó para BPA hasta 2015 y "solo se comunicó con una aplicación de teléfono". Además, según la Justicia, el uruguayo fue beneficiario de pagos a través de una caja B de BPA que funcionaba a través de una sociedad panameña.
En agosto de 2017, Sanguinetti quedó en libertad luego de pagar una fianza de US$ 30 mil, colocándosele una tobillera electrónica para seguir sus movimientos.