¿Con qué se queda Disney luego de la compra de Fox?

En un futuro cercano, el ratón Mickey podría dar una vuelta junto a Pluto en Springfield, la ciudad donde viven los Simpson. También podría pasar que los X-men reúnan fuerzas con los Vengadores, o que las futuras entregas de Avatar tengan al Xenomorfo de Alien como enemigo a derrotar. Si bien desde el punto narrativo estas fusiones son inverosímiles –excepto la de los X-men con los Vengadores–, a partir de 2018 dejarían de serlo legalmente hablando. Y esto sucede porque Disney, la empresa que hoy domina el mundo del entretenimiento, anexó a 21th Century Fox por US$ 52.400 millones.

Si bien la compañía del ratón no accede a todos los contenidos de la empresa de Rupert Murdoch –quedan por fuera todas las subsidiarias periodísticas y gran parte de las deportivas– para el mundo del entretenimiento, la compra es clave. Disney, propietario de personajes que hoy revientan taquillas como los héroes de Marvel o los Jedi de Star Wars, tendrá a su disposición franquicias millonarias, series de televisión legendarias y porciones de acuerdos que incluyen, por ejemplo, a sitios de streaming incipientes como Hulu.

Para los fanáticos de Marvel, la compra puede suponer una buena noticia. A partir de este momento, los X-men, Deadpool y los Vengadores pasan a ser propiedad del mismo conglomerado, por lo que algunos de los tantos crossovers (cruces entre los personajes) que los fans esperar podrían llegar a concretarse.

Por ejemplo, varios de los miembros del grupo de mutantes del Profesor X forman parte de eventos relevantes dentro de la línea temporal de los cómics de Marvel, y luchan codo a codo con figuras como Capitán América o Iron Man. Ahora eso podría replicarse en el cine. En este paquete también entran Deadpool –uno de los últimos grandes éxitos de Fox– y Los Cuatro Fantásticos.

A ellos también se les suman las sagas de Alien, las futuras entregas de Avatar, la saga animada La Era de Hielo, Depredador y El planeta de los simios. Además, con la compra Disney accede a títulos históricos: Mi pobre angelito, Duro de matar y Día de la Independencia.

En televisión, y casi que a nivel global, Fox es sinónimo de Los Simpson. Y luego de casi 30 años en pantalla, ese sinónimo podría cambiar. Con la compra de Fox, Disney accede a la familia más famosa de la televisión y podrá definir si su legado se extiende por más décadas. También tendrá bajo su ala a los legendarios detectives paranormales Mulder y Scully, ya que Los archivos X es otra de los títulos que entran en el paquete de propiedades.

Disney también accede a los contenidos de National Geographic y a FX, uno de los canales más interesantes a la hora de producir ficción. En los últimos años, de allí han surgido las series American Crime Story, Fargo, This is us, The Americans y Atlanta.

Las intenciones de Disney quedaron bastante claras cuando decidió retirar todos sus contenidos de Netflix. Con la compra de Fox, el proyecto de la compañía de tener su propio sitio de streaming avanzó varios pasos para su concreción, ya que a partir de este momento pasará a controlar el 30% de Hulu, sitio de streaming estadounidense detrás de algunas de las series más destacadas y premiadas del año, como The Handmaid's Tale.