El presidente Nicolás Maduro logró su cometido: sus seguidores eligen este domingo una Asamblea Constituyente sin oposición, pese a las violentas protestas que dejan más de 100 muertos en cuatro meses y al fuerte rechazo internacional.
Ya son al menos nueve los muertos que deja la violencia que estalló entre sábado y domingo en Venezuela en el marco de la votación de la Constituyente, que la oposición considera un "fraude" para perpetuar a Maduro en el poder.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela decidió extender durante una hora más, hasta las 19.00 hora local, las votaciones. "Hemos decidido extender el horario de votación por una hora más y como siempre hasta que haya electores en la cola para ejercer el derecho al voto", dijo la rectora Sandra Oblitas a periodistas.
La rectora hizo el anuncio a pocos minutos de cerrar los centros de votación. También reconoció que el CNE presentó "retardos en el inicio del proceso".
Colombia, México, Argentina, Perú y Canadá son algunos de los países que no reconocerán las elecciones. Por su parte, la embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Nikki Haley, dijo que Venezuela está dando "un paso hacia la dictadura" al celebrar la polémica elección de los miembros a una Asamblea Constituyente, convocada por el presidente Nicolás Maduro.
"La elección fraudulenta de Maduro es otro paso hacia la dictadura. No aceptaremos un gobierno ilegítimo. El pueblo venezolano y la democracia prevalecerán", escribió Haley en un tuit sobre la elección, que se ha visto ensombrecida por una escalada de la violencia.
Maduro fue el primero en depositar lo que llamó un "voto por la paz" en un colegio del oeste de Caracas, adonde acudió con su esposa, Cilia Flores, y dirigentes del partido de gobierno.
"Le pido a Dios todas sus bendiciones para que el pueblo pueda ejercer libremente su derecho democrático al voto", dijo Maduro frente a un atril, vestido con una camisa roja junto a una bandera de Venezuela.
Los centros electorales abrieron a las 6 de la mañana para elegir a 545 asambleístas que formarán un suprapoder que regirá al país por tiempo indefinido.
"Ha querido el emperador Donald Trump prohibirle al pueblo ejercer el derecho al voto y yo dije llueva, truene o relampaguee habrá elecciones y Asamblea Constituyente", añadió Maduro.
El triunfalismo no es para menos. Contra viento y marea, el mandatario llevó a puerto su polémico proyecto: un as bajo la manga que sacó en medio de la ola de protestas que exigen, desde hace cuatro meses, su salida del poder.
El líder opositor venezolano Leopoldo López, en arresto domiciliario, llamó a la comunidad internacional a desconocer las elecciones. En mensajes difundidos en Twitter, López pidió a los "demócratas del mundo" desconocer la Constituyente "como lo ha hecho el pueblo venezolano", al tiempo que denunció una "brutal represión" de las fuerzas de seguridad contra manifestantes opositores.
"Alertamos a la comunidad internacional la represión brutal y el asesinato de venezolanos en protestas pacíficas (...). Hoy ocurre el fraude más grande de nuestra historia: ilegítimo, inconstitucional, viciado electoralmente y en medio de una brutal represión", añadió.
Muertes por balas y perdigones, linchamientos, saqueos, edificios y vehículos quemados, ciudades semiparalizadas agravaron la crisis de un país polarizado y al borde del colapso económico.
Tras no lograr detener la Constituyente con marchas, huelgas y bloqueos, la oposición llamó a una masiva concentración en Caracas y a poner barricadas en vías de todo el país, pese a que el gobierno amenazó con encarcelar a quienes boicoteen la votación.
"Quedará constancia de que ese fraude constituyente y electoral es el más grave error histórico que pudo cometer Maduro", aseguró el diputado Freddy Guevara, a nombre de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
En uno de los varios choques entre las fuerzas del orden y opositores a la Asamblea Constituyente, militares venezolanos dispararon gases y balas de goma contra manifestantes que bloqueaban una autopista de Caracas.
Tras un primer enfrentamiento en el acomodado barrio de Santa Fe, los efectivos de la Guardia Nacional se retiraron y los manifestantes -encapuchados y algunos con bombas molotov- volvieron a bloquear la vía, desatándose nuevos disturbios.
"Aquí estamos en resistencia pura, el proceso que se está llevando hoy va contra la Carta Magna y el pueblo no va a ceder la calle hasta tanto no se vaya este mal gobierno", dijo a la AFP Carlos Zambrano, mientras arengaba a otros miembros de la llamada "resistencia".
"Nos mantendremos en pie de lucha hasta que se vaya Maduro", añadió el hombre de 54 años.
En el barrio El Paraíso y su vecino Montalbán (oeste) denunciaron por su parte que militares "invadieron" edificios en la búsqueda de "guarimberos", un término achacado a quienes manifiestan bloqueando vías.
"Llegaron disparando, desde la esquina de allá. Era correr y correr, y disparaban contra los edificios, disparaban a la gente" y "todo el mundo desesperado metiéndose en los edificios", relató al canal Vivo Play una vecina, Conchita Ramírez.
"No sé qué odio nos tienen, venezolanos contra venezolanos... ¡Esto es una guerra!", añadió sin poder contener las lágrimas.
En Maracaibo, la segunda ciudad de Venezuela, la Guardia Nacional también lanzó lacrimógenas y bombas de estruendo, constató una periodista de la AFP.
Los militares también arremetieron contra periodistas en El Paraíso, oeste de Caracas.
"Se van de aquí antes de que les parta toda mierda", dijo un uniformado a periodistas, según imágenes captadas en la cámara de Vivo Play que estaba encendida.
La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) llamó a sus seguidores a una gran concentración en Caracas y a trancazos en el interior del país contra la elección de los miembros de una Constituyente, que considera será un traje a la medida del presidente Nicolás Maduro para perpetuarse en el poder.
Siete agentes de la Policía Nacional resultaron heridos tras una explosión durante manifestaciones en Caracas.
Ya son nueve los muertos que ha dejado la escalada de violencia. El último confirmado fue un militar, que murió de un disparo durante una protesta. La víctima, identificada como Ronald Ramírez, "recibió un disparo en el pómulo izquierdo" en La Grita, en el occidental departamento de Táchira, fronterizo con Colombia, informó la Fiscalía.
Dos adolescentes, de 17 y 13 años, murieron por heridas de arma de fuego, informó la Fiscalía. Uno de ellos falleció en la localidad de Tucapé, y el otro, el más pequeño, en Capacho Viejo, ambas localidades en el occidental estado Táchira, fronterizo con Colombia.
Un candidato a asambleísta de la Asamblea Constituyente fue asesinado en la noche del sábado en su casa en Ciudad Bolívar, al sureste de Venezuela. La Fiscalía no lo vinculó aún con móviles políticos.
Por otra parte, un dirigente juvenil de la oposición y otros cuatro hombres murieron este domingo. El Ministerio Público confirmó que Ricardo Campos, de 30 años, murió en la madrugada en Cumaná, en circunstancias que están en investigación. El diputado opositor Henry Ramos Allup precisó que la víctima era secretario juvenil seccional de su partido Acción Democrática (AD) y que murió de un disparo.
Por otra parte, en el estado de Mérida, entre sábado y domingo murieron tres hombres en manifestaciones, y otro más falleció en la ciudad de Barquisimeto.
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