La manera de demostrarlo fue con una doble votación. Cuando la presidenta del Senado, Lucía Topolansky pidió votar el proyecto en general, recogió 15 votos -insuficientes para su aprobación- porque Moreira no estaba en sala y ningún legislador de la oposición levantó su mano. Luego hubo un pedido de reconsideración del voto y ahí si se alzaron todas las manos en el Senado. De esta forma, la oposición quiso "demostrar" que el Frente Amplio antepone "los intereses de su partido a los del país", según fundamentó el senador colorado Pedro Bordaberry.
Pero la historia no terminó ahí. Y tras la jugada de la oposición Moreira ingresó a votar el articulado en particular.
"Mienten, como siempre mienten", gritó el senador del Frente Amplio, Enrique Pintado, cuando se levantó la sesión con los ojos clavados en legisladores nacionalistas y aduciendo que no era real que ese proyecto había salido gracias a los votos opositores al gobierno. La también frenteamplista Daisy Tourné se unió a sus gritos y coreó "mentirosos" con su compañero de bancada.
Sin embargo, fuentes partidarias dijeron a El Observador que la salida de Moreira causó molestia en la bancada frenteamplista porque la senadora no respetó el mandato de la fuerza política.
La jugada de la oposición cerró una sesión que, por momentos, tuvo como protagonista al funcionamiento interno del partido de gobierno. Para el nacionalista Luis Lacalle Pou, por ejemplo, lo sucedido dentro del oficialismo fue una muestra de que "siempre se antepone una presión partidaria". "No importa perjudicar al país, importa presionar, En eso seguramente el Partido Nacional sea mucho más liberal", dijo.
El senador del Partido Independiente, Pablo Mieres, al igual que los demás legisladores de la oposición que pidieron la palabra, acusó al partido de gobierno de "trancar al país" con sus "trancazos internos".
"Todo el 2017 estuvo trancado porque la bancada del gobierno se negaba a considerarlo, sabiendo que los votos estaban. En un año nuestros competidores avanzaron mucho más que nosotros para votar esto, que todos sabemos que es más simbólico que material. Es un símbolo de cuál es la voluntad política del país en materia de inserción internacional", dijo con molestia.
Lea también: Con el visto bueno del Plenario del FA, comisión del Senado aprobó TLC con Chile
Bastante diferente fue la visión de Marcos Otheguy, senador del Frente Amplio, quien reivindicó "ese camino (el de las decisiones del Plenario) como un principio, como una fortaleza".
"Algunos integrantes de la oposición tienen una especie de fascinación por cómo funciona el Frente Amplio", ironizó y agregó: "Es un partido con una vigorosa democracia, con democracia interna".
En tanto, el senador Enrique Pintado criticó que en la sesión se hiciera una "especie de radiografía del Frente Amplio" y remarcó que son "unión en la diversidad". Esa diversidad fue remarcada por el senador José Mujica pero para dejar claro "que el Partido Nacional y el Partido Colorado tuvieron gigantescos desacuerdos".
La inserción internacional y el futuro
De aprobarse en Diputados, el tratado liberalizará el comercio en servicios, como para los casos de las empresas de software que no deberán pagar más 25% de aranceles para entrar al mercado chileno. Hay sectores que quedaron afuera por decisión de cada una de las partes, por ejemplo servicios que solo incluyan monopolios o de telecomunicaciones.
En la Cámara de Senadores, la discusión también tuvo su peso en lo que implica apoyar ese acuerdo comercial. La oposición celebró en cada una de sus intervenciones que el acuerdo votado este martes era una muestra de que Uruguay empezó a trazar un camino de apertura.
Bordaberry lo definió como un "día de alegría en el que el país está dando un paso firme" y en el que "la palabra TLC deja de ser una mala palabra". Lacalle Pou lo consideró como "una señal al mundo" y el también blanco Jorge Larrañaga se trató de un día "realmente muy importante".
En el Frente Amplio, por su parte, marcaron que la aprobación de este TLC no implica que se apoyarán todos los que puedan venir. "Esto es un modelo de desarrollo. No significa que todos los TLC van a ser votados por esta fuerza política", quiso aclarar la senador socialista Mónica Xavier.
Lea también: Rebeldes contra el TLC acatarán al Plenario
Mujica, por su parte, fue enfático al afirmar que cuantos más acuerdos haya mejor será para el país porque "el comercio exterior termina siendo determinante para Uruguay" y "no hay un tratado que solucione todos los problemas". "Solo la diversificación puede establecer un margen de relativa seguridad. Si estoy más repartido en el mundo, puedo estar en condiciones de soportar un poco más", sostuvo. Pese a las diferencias y discusiones, en una línea similar también se habían manifestado los legisladores de la oposición. La votación no implica que ese acuerdo esté vigente, ya que necesita además de los votos en Diputados, que también se apruebe en el otro país.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá