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DGI espera recibir unas 220 mil declaraciones por IRPF y IASS
Como todos los años, se acerca junio y con ello llega el momento de presentar ante la Dirección General Impositiva (DGI) las declaraciones juradas del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y del Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS) correspondientes al ejercicio 2017.
El fisco todavía no definió los plazos para la presentación de la documentación ni el calendario de vencimientos de pago para quienes tengan saldos por cancelar. Pero sí se puede saber en qué casos se debe presentar la declaración y cuando no.
Con la información de las declaraciones gravadas con IRPF e IASS, la DGI establece si las retenciones por mes del trabajador o pasivo son las adecuadas o, por el contrario, si hay saldos a pagar o que corresponde reliquidar.
Los que están exonerados
Los trabajadores dependientes con un único ingreso anual que no superaron los $ 559.125 nominales, y que simultáneamente no optaron por la reducción del 5% en los anticipos por el régimen de núcleo familiar.
Los trabajadores dependientes con un único ingreso que sí superaron los $ 559.125 nominales, pero que percibieron ingresos en diciembre de 2017 –la empresa ya les hizo el ajuste anual ese mes– y no optaron por la reducción del 5% en los anticipos por el régimen de núcleo familiar.
Los que deben declarar
Los trabajadores que tengan más de un empleo y sus ingresos hayan sido superiores a $ 559.125 nominales en todo el año pasado. También los que tuvieron un único empleador durante todo el año y superaron ese monto, pero en diciembre no tuvieron ingresos.
Los jubilados con más de una pasividad que hayan percibido ingresos superiores a $ 559.125 nominales durante 2017.
Alquileres y cuota hipotecaria
La declaración jurada también cuenta para quienes quieran deducir alquiler o cuota hipotecaria. En el primer caso se imputa como pago del IRPF el 6% del arrendamiento efectivamente pagado en 2017 sin perjuicio de que el contrato abarque la totalidad del año. Para ello se debe identificar al arrendador, y además, el contrato debe estar por escrito y su plazo no debe ser inferior a un año.
Al beneficio de cuota hipotecaria pueden acceder exclusivamente los contribuyentes de IRPF siempre que el costo de la vivienda al momento de la compra no haya superado las 794 mil unidades indexadas (UI) –unos US$ 104 mil de hoy. El monto máximo a deducir no puede superar las 36 Bases de Prestaciones y Contribuciones anuales ($ 138.500 a valores actuales).Formularios en línea
En esta oportunidad la DGI espera recibir alrededor de 220 mil declaraciones, cantidad similar a la del año pasado. Fuentes del organismo expresaron a El Observador que uno de los objetivos de la nueva campaña será ampliar la cantidad de declaraciones que se realizan en línea a través de la página web.
La implementación de ese alternativa digital se profundizó en 2017 y obtuvo buenos resultados por ser una opción "amigable" y "fácil de manejar", se indicó.
El resto sigue prefiriendo descargar los formularios y completarlos para luego presentarlos por internet o en Abitab, o recurrir a la atención presencial en las oficinas de la DGI para confeccionar el documento.
Devoluciones
Además, hay contribuyentes que tendrán créditos automáticos para cobrar que se corresponden con liquidaciones de IRPF del año pasado. El fisco todavía no tiene el monto total de los reintegros que se comenzarán a efectivizar partir de junio. En la última campaña la devolución abarcó a 206 mil personas que cobraron unos $ 3.000 en promedio.
Se trata de contribuyentes con un solo trabajo en 2017 y que acceden a la devolución sin necesidad de presentar la declaración jurada.
Como el IRPF es un impuesto anual con retenciones mensuales, recién con la liquidación del sueldo del mes de diciembre es posible determinar el monto exacto del impuesto.
Entonces puede ocurrir que el trabajador haya obtenido en algunos meses del año una retribución mayor a la habitual y en ese caso la retención mensual pudo haber sido realizada a una tasa mayor de la que correspondía aplicar considerando las retribuciones de todo el año.
El resultado total de la campaña 2016 marcó que la DGI devolvió unos US$ 90 millones (incluye devoluciones automáticas) y reliquidó impuestos por unos US$ 63 millones.
Más recaudación
Desde 2017 el gobierno dispuso un aumento de tasas en las franjas superiores del IRPF y el IASS, al tiempo que las deducciones dejaron de ser progresivas y pasaron a calcularse a una tasa fija de 8%.
Esa fue una de las modificaciones emblema que castigó a los salarios en el ajuste fiscal dispuesto en la Rendición de Cuentas de 2016 con el objetivo de mejorar el déficit de las cuentas públicas.
Por esa vía la recaudación de IRPF creció 26,3% interanual y sumó US$ 2.176 millones. La mayor parte de los ingresos computados por ese tributo correspondió a la categoría II proveniente de las rentas de trabajo. Allí los ingresos del organismo sumaron unos US$ 1.880 millones con una expansión en términos reales del 27,7%.
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