Era el edificio de Correos, cerca de Puerto Madero y del Luna Park. Allí durante el gobierno de Cristina Kirchner se construyó el Centro Cultural Néstor Kirchner, el presidente argentino cuyo padre fue cartero.
En Argentina se debate hasta la existencia del Obelisco, por lo cual no hay cifra clara y cierta sobre lo que costó la refacción y puesta a nuevo de este centro cultural que, se dice, es el más importante de A. Latina y uno de los más relevantes del mundo.
Tras la muerte de Néstor Kirchner, la lógica política argentina debía contemplar un gran homenaje con rasgos de permanencia. Así fue que al acercarse las conmemoraciones del bicentenario de la Revolución de Mayo, el gobierno de Cristina Fernández, esposa de Kirchner, resolvió instalar en el edificio histórico del Correo Central el «Centro Cultural del Bicentenario». Para ello llamó, en 2006, a un concurso internacional de anteproyectos a fin de decidir qué nuevo uso darle para concretar tal propósito. En el concurso se presentaron más de 340 estudios de arquitectura de más de 20 países. El primer premio se otorgó en noviembre de ese año, por decisión unánime del jurado, a los estudios de arquitectura Bares y Asociados de La Plata, y Becker-Ferrari, de Buenos Aires.
Las obras concluyeron en el 2012.
El centro cultural, que tiene 110.000 metros cuadrados, aloja como espacio central la Gran Sala de Conciertos, bautizada como la Ballena Azul por su forma y el color de las paredes externas. Se trata de una sala sinfónica con capacidad para 1950 espectadores, que muestra un imponente órgano de viento, de 3500 tubos y 46 registros, diseñado especialmente en Alemania por la firma Klais.
Como coronamiento del espacio central, se montó una estructura vidriada, el Chandelier, que cuelga desde el techo. Se trata de un museo de arte contemporáneo. También hay una sala de música de cámara para 600 espectadores; 51 salas de exposición; una cúpula que da la vuelta por todo el diámetro del edificio con terrazas abiertas; tres restaurantes; 16 salas de ensayo; 18 vestíbulos, y 20 camarines.
Hay dos pianos de gran cola Steinway & Sons Hamburgo modelo D-274 y un piano de cola de la misma firma, modelo B-211 con sus respectivas butacas y cobertores. (Un piano de gran cola Steinway & Sons cuesta alrededor de 160.000 dólares). El Centro Kirchner posee otros valiosos instrumentos y obras de arte adquiridas para sus muestras permanentes.
También tiene un gran espacio –llamado La Cúpula- en donde se realizan interesantes conciertos que son trasmitidos por el canal Encuentro. Uno de los más interesantes fue el de Gustavo Santaolalla.
Hay otro espacio, denominado "Sala para Repensar", en donde se ubicaron sillas playeras. Un interesante lugar en donde la gente se detiene, se sienta, piensa, duerme (o lee su Smartphone).
En una de las múltiples salas hay una preciosa muestra sobre Astor Piazzola y en otra de arte contemporáneo se expone una obra del uruguayo Rimer Cardillo, entre otros artistas.
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