Economía y Empresas > Estudio
El e-mail, uno de los principales enemigos de la creatividad de los gerentes
La publicación Harvard Business Review lanzó un estudio en 2016 en el que monitoreó durante tres meses el uso del tiempo de 27 gerentes generales –2 mujeres y 25 hombres– de compañías que cotizan en bolsa con un valor promedio de US$ 13 mil millones. Según publicó Business Insider, el estudio es el primero que se realiza sobre el uso de tiempo de los gerentes en un período extendido y uno de los datos que más llamó la atención fue que ver y responder e-mails les lleva el 24% de su tiempo.
"Los gerentes generales son eternamente copiados en e-mails. Sienten la presión de responder porque ignorar un email es visto como maleducado. Deberían reconocer que la mayoría de los correos cubren temas que no los involucran y que pueden llevarlos a perder el tiempo", escribieron Porter y Nahria en el Harvard Business Review.
Lea también: Diez cosas que nunca debe decir en un e-mail laboral
En promedio, lleva seis segundos recibir un e-mail típico en la bandeja de entrada pero luego de leerlo suele llevar 25 minutos volver al estado de productividad anterior, explicaron los especialistas. Para realizar el estudio, cada asistente ejecutivo del gerente fue entrenado para monitorear y registrar en intervalos de 15 minutos durante 24 horas los 7 días de la semana, por lo que el estudio registró cerca de 60.000 horas.
Los e-mails de un gerente general pueden crear cadenas de comunicación innecesarias y plantear normas irreales, sobre todo si ese jefe envía emails a la noche o durante el fin de semana, encontraron los autores. En el estudio también encontraron relación entre el comportamiento de e-mails de estas personas con malas prácticas en sobreuso de la información electrónica en la empresa.
Setear las expectativas correctas y normas para los mails que el gerente tiene que ver y responder es esencial, señalan Porter y Nohria. Sugieren, además, que el filtrado de mensajes lo realice el o la asistente ejecutiva. "El e-mail interrumpe el trabajo, extiende el día de trabajo y se mete en el tiempo familiar y no conduce a discusiones reflexivas. Los gerentes tienen que permanecer humanos y auténticos y no se puede hacer eso por mail", concluyeron.
