Opinión > ANÁLISIS / GONZALO FERREIRA
El "excusómetro" a tope en seguridad
La comunicación del gobierno sobre la seguridad exacerba la sensación de fracaso
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23 de junio de 2018 a las 06:00
¿Cuál es el fino límite entre el diagnóstico de una situación y una excusa? Por estas horas, la mayor parte de las respuestas del gobierno en materia de seguridad se parecen más a pretextos que a un análisis de cuestiones a resolver.
Aquí va un lista de algunas de las justificaciones escuchadas recientemente:
- La liberacion de presos en octubre por parte de la Suprema Corte aumentó los delitos (Bonomi).
- El nuevo Código del Proceso Penal (CPP) generó problemas y la Justicia investigó menos.
- El problema de la violencia no es local, afecta a todo el mundo. (Tabaré Vázquez)
- Todo es culpa del narcotráfico, que no es un problema exclusivo de Uruguay (Lucía Topolansky).
- El Mides, Secundaria y Primaria no le dan datos a la Policía para ayudar en la seguridad (Layera).
- La ley de inclusión financiera, si bien sacó dinero de la calle, contribuyó al aumento de los robos. Los ladrones deben procurarse más bienes para compensar esa falta de plata. (Jorge Vázquez).
- Ante los robos a cajeros: los bancos no invierten en seguridad.
- Tener 600 policías custodiando casos de violencia doméstica reduce la capacidad de patrullaje. (Son 600 policías en unos 28 mil).
- Whatsapp no permite hacer escuchas telefónicas.
- En varios casos de asesinatos en rapiñas: el problema es que se resisten al robo (Bonomi).
- Aumentan las cifras de los delitos porque ahora todos los patrulleros tienen tablets para registrar más fácil las denuncias.
- El CPP funcionó mal los primeros meses porque se preveían 220 mil denuncias de delitos y llegaron 380 mil (Jorge Díaz).
¿Esos argumentos son mentira? En la mayoría de los casos no. ¿El Ministerio del Interior o los operadores del sistema judicial, solo se quedan en el diagnóstico? En algunos casos sí, en otros tratan de solucionar esas situaciones.
Las excusas son algo más que un problema de comunicación. Porque lo que denotan es una actitud sobre cómo encarar los problemas.
En una charla TED organizada en Málaga a principios de este año, Toni Nadal (tío y entrenador del exitoso tenista), habló largamente sobre el asunto de las justificaciones y cómo ellas pueden ser una tranca para avanzar.
"Nunca una excusa nos hizo ganar un partido", es uno de los mensajes que marcó a fuego en la estrella española. "He procurado que nunca me diera justificaciones. Es demasiado fácil justificarse constantemente", dijo.
Contó cómo lo preparó tanto para que venciera la tentación de encontrar el problema en otro lado, que a los 15 años estaba jugando muy mal un partido porque tenía la raqueta rota y no se dio cuenta de ello hasta que le avisaron.
"Estoy tan acostumbrado a tener la culpa yo que jamás hubiese imaginado que la raqueta me hacía perder", le contestó Nadal a su tío.
"Lo fundamental en Rafael ha sido tener claro que todo lo que le pasaba es responsabilidad de él", dijo Toni en la charla TED.
Si no se asumen los errores, es imposible cambiar. Este es un asunto muy discutido en el ámbito empresarial. Porque las excusas pueden ser muy nocivas para el desarrollo personal y de una compañía. Si bien son un salvavidas circunstancial, la persona que abusa de ellas pasa el mensaje de que tiró la toalla.
Y en seguridad eso es lo que sucede por estos días. Si ese discurso se cambia, al menos evitaría la señal de derrota, algo que empeora aún más la inseguridad.
