Al hablar en uno de los paneles del Foro de Inale realizado este viernes en la Torre de Antel expresó que un sistema difícil de instrumentar porque nadie puede decir que un tambero que remite menos de 480.000 litros anuales es chico y otro que envía anualmente 481.000 litros es grande. Tampoco puede ser una señal de que no hay que crecer porque se pierden la asistencia estatal.
Panizza afirmó que en lugar de esas ayudas, hay que crear los apoyos y las condiciones de rentabilidad para que el apoyo económico no sea necesario. Hoy como están las cosas es imprescindible hacerlo, pero lo lógico es que unos años antes se pueda hacer un diagnóstico y tratar de solucionar los problemas.
Opinó que hay que prever que cuando el productor tiene la tierra, no le falte comida y si tiene comida que no le falten vacas y que si tiene todo no le falte el gasoil. Se trata de lo que denominó apoyos anticipados y que cuando hay una superficie de tierra cercana a su campo, tenga prioridad absoluta y créditos para poderlo ocupar.
Panizza resaltó también que si el 70% de la producción lechera se exporta no se necesita ser especialistas en economía para saber cómo tener éxito en esa gestión. "Para poder competir en esos mercado, lo que se necesita es tener igualdad de condiciones, igualdad en costos que nuestros competidores del mundo, tener igualdad de condiciones comerciales que tienen tratados de libre comercio por todos lados".
Durante el Foro de Inale uno de los panales abordó los desafíos de la lechería uruguaya para los próximos 10 años. Se habló de políticas de investigación, de transferencia, de la necesidad y el desafío permanente de tener sistemas financieros más adecuados al negocio lechero, de una mayor y mejor inserción comercial del país y del espíritu cooperativo, entre otros puntos, resumió el moderador Ignacio Arboleya.
En ese marco resaltó tres factores que para mucha gente explica, el primero un conjunto de políticas públicas acumuladas que facilitaron el desarrollo lechero uruguayo hasta la propia creación de Inale.
El segundo es que desde un principio el sector impulsó estrategias de cooperación sectorial que pautaron su desarrollo y estilo de trabajo. Y el tercer factor es que un conjunto bastante numeroso de sus productores son especializados y que apuestan a la lechería. Son en buena parte productores medianos y familiares y como dijo Perera es importante que sigan estando porque hacen a la lechería nacional.
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