Espectáculos y Cultura > Sangre de campeones
Las cartas de Atilio Garrido y la productora Coral Cine tras polémica por documental
El periodista deportivo publicó un extenso comunicado en el que denuncia "errores" de la película; la productora contestó con otro mensaje
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04 de junio de 2018 a las 12:30
El documental Sangre de Campeones se estrenó el pasado jueves y su puntapié inicial fue con una polémica, gracias al discurso que el periodista deportivo Atilio Garrido realizó en la presentación de la película, en el que alabó el aporte de la empresa Tenfield –una de las gestoras del filme– al fútbol uruguayo, y que le valió un abucheo de parte de la sala.
Ya en ese momento, el productor Andrés Varela, parte de la productora de la película, Coral Cine, se desmarcó del discurso de Garrido, diciendo que la empresa realizó un aporte para la película, pero que "no fue el único".
El discusión se intensificó, luego de que Garrido publicara en los comentarios de la cuenta de Facebook de El Observador un extenso post en cuatro partes. Allí afirma que el documental contiene errores, y que la película no le fue mostrada antes de su estreno, cuando él figura como investigador, y autor de la idea original.
"He solicitado a la productora Coral Cine se eliminen esas inscripciones en la presentación y afiches promocionales, así como también mis apariciones con la voz y la leyenda que en algunos casos la identifica y en otros no, bajo la advertencia de adoptar otras medidas en caso de que no se proceda a cumplir el pedido", establece Garrido en el mensaje.
El periodista deportivo señala entre los errores un resultado erróneo para la primera final olímpica de 1928 entre Argentina y Uruguay (en la película se dice que fue 0-0 y fue 1-1); el señalar que Héctor Scarone terminó su vida como cartero; que la película no destaque el aporte de los clubes que cedieron jugadores; y sobre todo que no haya una mención a Nacional, equipo del que procedían la mayoría de los campeones de 1924, 1928 y 1930 (en el primer torneo los jugadores de Peñarol y otros equipos no podían integrar la selección porque se habían separado de la AUF y establecido su propia liga, no reconocida por FIFA), y que fue implusor de que el Mundial de 1930 se jugara en Uruguay, algo que luego fue respaldado por el gobierno.
"Lo más grave y doloroso llega cuando se presenta la final del campeonato Mundial de 1930 montada sobre un escenario de violencia y agresiones de todo tipo propinadas por el pueblo uruguayo antes, durante y después del partido contra los argentinos; el árbitro belga, y por los jugadores celestes en la cancha del Estadio Centenario", continúa Garrido, que señala que esa percepción es una falacia impulsada por un diario argentino, y que fue negada por el juez del partido y por otros periódicos bonaerenses.
"Coral Cine a lo largo de su historia ha trabajado con compromiso, honestidad y seriedad en todos sus proyectos", defiende el mensaje, que aclara que es imposible incorporar todos los detalles de la historia, y que las presuntas "omisiones" no vienen de una intención premeditada, sino de trabajar con distintos recursos y fuentes para presentar un relato en el que domine "la experiencia del espectador".
"Sin lugar a dudas, hay un gran aporte del Club Nacional de Football a la gesta deportiva de 1924 y al campeonato mundial de 1930, pero el espíritu del relato de Sangre de Campeones es ahondar en la gesta de una Selección Nacional y en los personajes más significativos, más allá de los escudos que llevaron. En las anteriores películas de Coral Cine, que completan esta trilogía (Mundialito y Maracaná), tampoco se hace especial alusión a Nacional ni a Peñarol, porque siempre se buscó un relato universal", apunta el comunicado de Coral Cine.
Ya en ese momento, el productor Andrés Varela, parte de la productora de la película, Coral Cine, se desmarcó del discurso de Garrido, diciendo que la empresa realizó un aporte para la película, pero que "no fue el único".
El discusión se intensificó, luego de que Garrido publicara en los comentarios de la cuenta de Facebook de El Observador un extenso post en cuatro partes. Allí afirma que el documental contiene errores, y que la película no le fue mostrada antes de su estreno, cuando él figura como investigador, y autor de la idea original.
"He solicitado a la productora Coral Cine se eliminen esas inscripciones en la presentación y afiches promocionales, así como también mis apariciones con la voz y la leyenda que en algunos casos la identifica y en otros no, bajo la advertencia de adoptar otras medidas en caso de que no se proceda a cumplir el pedido", establece Garrido en el mensaje.
El periodista deportivo señala entre los errores un resultado erróneo para la primera final olímpica de 1928 entre Argentina y Uruguay (en la película se dice que fue 0-0 y fue 1-1); el señalar que Héctor Scarone terminó su vida como cartero; que la película no destaque el aporte de los clubes que cedieron jugadores; y sobre todo que no haya una mención a Nacional, equipo del que procedían la mayoría de los campeones de 1924, 1928 y 1930 (en el primer torneo los jugadores de Peñarol y otros equipos no podían integrar la selección porque se habían separado de la AUF y establecido su propia liga, no reconocida por FIFA), y que fue implusor de que el Mundial de 1930 se jugara en Uruguay, algo que luego fue respaldado por el gobierno.
"Lo más grave y doloroso llega cuando se presenta la final del campeonato Mundial de 1930 montada sobre un escenario de violencia y agresiones de todo tipo propinadas por el pueblo uruguayo antes, durante y después del partido contra los argentinos; el árbitro belga, y por los jugadores celestes en la cancha del Estadio Centenario", continúa Garrido, que señala que esa percepción es una falacia impulsada por un diario argentino, y que fue negada por el juez del partido y por otros periódicos bonaerenses.
La respuesta de Coral Cine
Tras el descargo de Garrido, la productora publicó un comunicado en el que responde a los comentarios. "Nuestro interés como creadores es capturar en imagen y sonido los grandes mitos de la cultura popular uruguaya. Poder dar forma a las figuras que pueblan nuestro imaginario colectivo", establece desde un principio."Coral Cine a lo largo de su historia ha trabajado con compromiso, honestidad y seriedad en todos sus proyectos", defiende el mensaje, que aclara que es imposible incorporar todos los detalles de la historia, y que las presuntas "omisiones" no vienen de una intención premeditada, sino de trabajar con distintos recursos y fuentes para presentar un relato en el que domine "la experiencia del espectador".
"Sin lugar a dudas, hay un gran aporte del Club Nacional de Football a la gesta deportiva de 1924 y al campeonato mundial de 1930, pero el espíritu del relato de Sangre de Campeones es ahondar en la gesta de una Selección Nacional y en los personajes más significativos, más allá de los escudos que llevaron. En las anteriores películas de Coral Cine, que completan esta trilogía (Mundialito y Maracaná), tampoco se hace especial alusión a Nacional ni a Peñarol, porque siempre se buscó un relato universal", apunta el comunicado de Coral Cine.
