El niño mueve la boca frente al teléfono. Baila. Mueve la cámara. Cambia de postura y sigue moviendo la boca. Pero en ninguna parte del proceso emite sonido. Tranquilo, no se está volviendo loco, está usando Musical.ly, una de las aplicaciones de moda entre el público infantil y juvenil tanto uruguayo como del resto del mundo. ¿De qué se trata?
Como buena parte de la ropa, los electrodomésticos y los celulares que usamos, la aplicación nació en China. La crearon dos amigos, Alex Zhu y Luyu Yang, que buscaban desarrollar una aplicación pedagógica, en la que con videos cortos de entre tres y cinco minutos enseñaran diversas asignaturas y temas. Pero la iniciativa no funcionó. Entonces con los últimos fondos disponibles se reformularon y crearon un producto de entretenimiento pensado en primera instancia para los adolescentes estadounidenses, por su capacidad de adoptar novedades tecnológicas y convertirlas en tendencia, como ya había pasado con la hoy desaparecida Vine y la agónica Snapchat.
En los cuatro años desde su lanzamiento, la red de videos ha experimentado el camino habitual de este tipo de aplicaciones: incremento de la cifra de usuarios en millones, el ingreso de empresas como Coca-Cola a través de campañas publicitarias y la compra de parte de un gigante tecnológico, en este caso la compañía china Bytedance Technology.
Esto además marcó un quiebre con respecto a la tendencia habitual, que marca que las aplicaciones y redes sociales chinas no trascienden por fuera de ese país. Musical.ly tuvo alcance global y esto también llamó la atención de los compradores.
Mark Mulligan, analista independiente en MIDiA Reasearch explicó el éxito de Musical.ly al diario español La Vanguardia en estos términos: "Se dieron cuenta de que la oportunidad del sector no eran ni álbumes completos ni temas completos. Eran clips cortos de música que (los jóvenes) utilizan para expresarse e idenficarse."
Para los niños y adolescentes esta aplicación junta a los amigos pero también reúne a los ídolos: músicos, cantantes y youtubers –los íconos de esta nueva generación– están presentes en ella y publican sus contenidos. El interés por la plataforma ha llegado también a artistas como Ariana Grande, Shakira, Demi Lovato y Daddy Yankee, quienes la utilizan con regularidad y han publicado allí canciones para que sean usadas por el público de la aplicación. Otros se han vuelto famosos en esta plataforma Baby Ariel que cuenta con 22 millones de seguidores y solo tiene 16 años.
Y además les permite crear contenidos de forma casi instantánea, con un componente de diversión y entretenimiento constante, y aplicando elementos presentes en otras redes, como filtros de imagen o efectos que alteran la velocidad de la grabación. Los posteos pueden comentarse, cuentan con el botón de "me gusta" y se conectan con los perfiles de otras redes.
Pero lo que la diferencia de otras redes similares es que tiene un componente de montaje y edición instantánea que convierte a sus usuarios en cineastas en potencia: Musica.ly permite cortar planos y unirlos (dentro del límite de entre 15 segundos y un minuto) para que cada usuario cree sus propias narrativas breves.
Ahí se esconde una de las principales atracciones (claro que también está la música y el juego) para el público que, por decisión parental, no tiene el acceso permitido a otros espacios dentro de las redes sociales y de internet.
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