¿Cómo maximizar las recompensas de leerle cuentos a los bebés?

Los padres a menudo escuchan en las consultas pediátricas y en los primeros años de la escuela de sus hijos que la lectura es fundamental para apoyar el desarrollo y ese mensaje suele incorporarse en las familias como algo importante. Un informe resumido de Child Trends, por ejemplo, sugiere que al 55% de los niños de 3 a 5 años se le leyó todos los días de 2007. Según el Departamento de Educación de EEUU, al 83% de los niños de 3 a 5 años un miembro de la familia le leyó tres o más veces por semana en 2012.

Sin embargo, algo que este consejo de leer con bebés no aclara necesariamente es que lo que se encuentra en las páginas puede ser tan importante como la propia experiencia de leer libros. ¿Son todos los libros creados de la misma forma cuando se trata de lectura temprana? ¿Importa lo que escojas para leer?

Para guiar a los padres sobre cómo crear una experiencia de lectura de libros de alta calidad para sus bebés, un laboratorio de investigación en psicología realizó una serie de estudios sobre el aprendizaje de los pequeños. Uno de los objetivos era comprender mejor en qué medida la lectura de libros a los bebés es importante para el desarrollo del cerebro y el comportamiento.

¿Qué hay en la estantería?

Los investigadores ven claros beneficios de la lectura entre padres y bebés para el desarrollo infantil. La lectura compartida es buena para el lenguaje y el desarrollo cognitivo, aumenta el vocabulario y las habilidades de lectura previa y perfecciona el desarrollo conceptual.

Es probable que la lectura en conjunto también mejore la calidad de la relación entre padres e hijos al fomentar las interacciones Recíprocas. Ciertamente, les da a los bebés y a los padres un tiempo diario constante para abrazarse.

Investigaciones recientes han encontrado que tanto la calidad como la cantidad de lectura de libros en conjunto en la infancia predijeron el vocabulario de la infancia posterior, las habilidades de lectura y la capacidad para escribir nombres. En otras palabras, cuantos más libros lean los padres y más tiempo pasen leyendo, mayores serán los beneficios para el desarrollo de sus hijos de 4 años.

Este importante hallazgo es uno de los primeros en medir el beneficio de la lectura desde la infancia. Pero aún queda mucho por descubrir acerca de si algunos libros pueden conducir naturalmente a interacciones de mayor calidad y un mayor aprendizaje.

Bebés y libros en el laboratorio

En distintas investigaciones suele seguirse a los bebés durante los segundos seis meses de vida y se ha descubierto que cuando los padres les muestran libros con caras u objetos que tienen nombres individuales, los pequeños aprenden más, generalizan lo que aprenden a nuevas situaciones y muestran respuestas cerebrales más especializadas, a diferencia de los libros sin imágenes o con una inespecífica.

En una de las investigaciones, financiada por la National Science Foundation y publicada en la revista Child Development, se hizo lo siguiente: se llevó a bebés de seis meses a un laboratorio, donde se analizó cuánta atención prestaban a los personajes de una historia que nunca habían visto antes. Se utilizó electroencefalografía para medir sus respuestas cerebrales. Una red de 128 sensores con forma de gorra permitían registrar la electricidad que se emite de forma natural desde el cuero cabelludo mientras funciona el cerebro. Se midieron estas respuestas neuronales mientras los bebés miraban y prestaban atención a las imágenes en la pantalla de una computadora. Estas mediciones del cerebro pueden decir qué saben los bebés y si pueden distinguir la diferencia entre personajes. También se rastreó su mirada usando la tecnología de seguimiento ocular para ver en qué partes de los personajes se enfocaron y durante cuánto tiempo prestaron atención.

Luego, los voluntarios fueron divididos en tres grupos. Un grupo de padres leyó libros de cuentos para bebés que contenían seis personajes con nombres individuales que nunca antes habían visto. A otro grupo se les dieron los mismos libros de cuentos, pero en lugar de nombrar individualmente a los personajes, se usó una etiqueta genérica e inventada para referirse a todos los personajes. Finalmente, a los bebés del tercer grupo no se les leyó nada especial para el estudio.

Transcurridos tres meses, las familias regresaron al laboratorio para medir nuevamente la atención de los bebés a los personajes de los cuentos. Resultó que solo aquellos que recibieron libros con caracteres etiquetados individualmente mostraron una mayor atención en comparación con su visita anterior. Y la actividad cerebral de los bebés que aprendieron etiquetas individuales también mostró que podían distinguir entre diferentes personajes individuales. No se vieron estos efectos en los otros bebés.

Estos hallazgos sugieren que los bebés muy pequeños pueden usar etiquetas para aprender sobre el mundo que los rodea y que la lectura de libros compartidos es una herramienta eficaz para apoyar el desarrollo en el primer año de vida.

Entonces, ¿qué significan estos resultados para los padres que desean maximizar los beneficios de la hora del cuento? No todos los libros son creados iguales. Los libros que los padres deberían leer a niños de 6 y 9 meses probablemente serán diferentes a los que leen a niños de 2 años, que probablemente serán diferentes a los apropiados para niños de 4 años. En otras palabras, para aprovechar los beneficios de la lectura de libros compartidos durante la infancia, debemos estar leyendo a nuestros pequeños los libros correctos en el momento adecuado.

Para los bebés, encontrar libros que nombren diferentes personajes puede llevar a experiencias de lectura de libros compartidos de mayor calidad y generar los beneficios de aprendizaje y desarrollo del cerebro. Todos los bebés son únicos, por lo que los padres deben tratar de encontrar libros que les interesen.

Hablar con los bebés es importante para su desarrollo. Entonces, padres de bebés: agreguen la lectura de libros compartidos a sus rutinas diarias y nombren a los personajes. Hablen con sus bebés temprano y con frecuencia para guiarlos a través de su increíble nuevo mundo y permitan que la historia les ayude.