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¿Conde o Mejía? El primer desafío de Domínguez
Una práctica de dos horas marcó el primer día de Eduardo Domínguez como entrenador de Nacional. El argentino pisó firme en Los Céspedes al declarar que tomó parte en la decisión de no renovar los contratos que vencieron. Y de ahora en más, deberá tomar varias decisiones claves para conformar un equipo competitivo.
Los desafíos de Domínguez comienzan de atrás para adelante y a la hora de pensar en el equipo deberá optar entre Esteban Conde y Luis Mejía.
Conde, de 35 años, es desde 2015 el dueño del arco de Nacional. Se lo ganó por grandes actuaciones a nivel local e internacional. Es un golero que aporta seguridad, aparece cuando el equipo lo necesita y tiene muy buen juego de pies. Sin embargo, desde que llegó al club solo ganó el Uruguayo Especial de 2016 y en ese lapso, Peñarol salió campeón tres veces.
El año pasado, Alexander Medina optó por rotar todo el plantel y llevó esa idea hasta el puesto del golero aunque quedó claro que en los partidos importantes el titular era Conde que atajó en 38 encuentros contra 16 de Mejía.
El ex Fénix quiere tener minutos que le permitan mantenerse en el arco de la selección panameña.
La proyección de juveniles
Domínguez tiene en sus manos tiene un plantel extremadamente joven. Por el momento, el 75% del grupo está integrado por jugadores del club surgidos en juveniles y que, en su mayoría, no tuvieron experiencias en Primera o en otros clubes.
A partir de eso, ¿será esa la base del equipo que afrontará la temporada? Desde el club informaron a Referí que no, que la apuesta del club pasa por dar espacio a los juveniles que puedan confirmar que están en condiciones de asumir protagonismo en el primer equipo.
Domínguez brindará minutos calificados a los juveniles, y los irá administrando para que encuentren en los seis refuerzos (como mínimo que llegarán), de jugadores con experiencia, el respaldo para que el salto al plantel de Primera División no resulte traumático, explicaron.
A modo de comparación, el Nacional de 2018 de Medina, que intentó brindar espacio a los juveniles cerró el año solo con Christian Oliva como titular.
A este caso hay que agregarle a Guzmán Corujo quien era titular indiscutido –fue figura del clásico del Apertura– hasta que se rompió los ligamentos.
Gabriel Neves, Brian Ocampo y en el primer semestre Diego Coelho y Facundo Labandeira, quienes luego salieron a préstamo, fueron otros juveniles a los que Medina hizo debutar en 2018.
Nacional jugará el primer partido oficial de la temporada 2019 el 3 de febrero, con el clásico de la Supercopa. Dos semanas antes, el 21 de enero jugará el primer clásico de verano, pero a ese partido llegará con un boceto muy básico del equipo que se verá a lo largo de la temporada 2019.
Para evitar reclamos de los hinchas, que renuevan la esperanza con la llegada de un nuevo cuerpo técnico y la comisión directiva pero cargan con el peso del bicampeonato aurinegro, Domínguez puntualizó en su primera conferencia de prensa en Los Céspedes, que la preparación de su equipo está enfocada en el clásico de febrero.
Ahí está el otro gran desafío del DT: armar en 30 días un equipo competitivo, frente a un Peñarol que viene armado.
