Si bien los días más fuertes de la Semana Santa son los que se concentran en el Triduo Pascual -que van desde la tarde del jueves a la noche al domingo- empieza la semana más importante del año para los católicos. Según explica la Conferencia Episcopal en su página iglesiacatolica.org.uy se trata de la celebración anual cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret.
"Lo importante de este tiempo no es recordar con tristeza lo que Cristo padeció, sino entender por qué murió y resucitó. Es celebrar su entrega hasta el fin por amor a todos y el poder de su Resurrección, que es primicia de la nuestra", dice el mensaje en el que explican el significado que tiene cada día.
Este día se celebra la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén en la que todo el pueblo lo alaba como rey con cantos y palmas. Por esto los fieles, al participar ese día de la misa, llevan sus ramos de olivo a la iglesia para ser bendecidos, como signo de la victoria de Cristo.
Son días en los que la iglesia llama a la reflexión sobre la importancia de la Semana Santa y a "vivir el perdón sacramental", a través de la confesión de los pecados.
En la mañana del jueves santo en cada diócesis se celebra la Misa Crismal, donde el obispo junto a todos los sacerdotes, bendice los santos óleos con los que se celebrarán luego durante todo el año los sacramentos (Bautismo, Confirmación, Unción de los Enfermos). En esa celebración los sacerdotes también renuevan las promesas de entrega y servicio que realizaron al ordenarse.
El Triduo Pascual se abre el jueves de tarde con la celebración de la Cena del Señor. Es un momento fundamental para los católicos, ya que se conmemora el momento en el que Jesús quedó presente en el pan y en el vino: "dejó su Cuerpo y su Sangre. Ese día instituyendo la Eucaristía también instituyó el Sacerdocio Ministerial. Otro aspecto fundamental del Jueves Santo es el Mandamiento del Amor que Jesucristo deja a sus discípulos, y lo hace dando ejemplo al lavar los pies de sus Apóstoles".
Este día se recuerda la Pasión y Muerte de Jesús. Es el único día en el año que no hay misa. Los católicos se reúnen en una celebración en la que se lee el relato de la Pasión, se adora solemnemente la cruz y se comulga con las hostias consagradas el jueves santo. Ese día también se realiza el “Vía Crucis”, camino de la Cruz que consiste en acompañar a Jesús en el camino hasta la crucifixión, repasando 14 momentos (estaciones) desde que fue condenado a muerte hasta su sepultura.
Ese día por la mañana se hace la visita de las siete iglesias.
Es el día que Jesús estuvo muerto en el sepulcro. Durante la mañana mucha gente va en silencio a rezar a las iglesias.
Por la noche del sábado santo, ya simbólicamente comenzando el domingo, se celebra la resurrección de Jesús, en la Vigilia Pascual. Es "la noche más importante del año y más alegre para los católicos, ya que Jesús venció a la muerte para dar vida. Esto quiere decir que Cristo da la oportunidad de salvarse, de entrar al Cielo y de vivir siempre felices en compañía de Dios. Pascua es el paso de la muerte a la vida", dice la Iglesia Católica.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá