"Hubo jugadores de Arsenal que se negaron a estrecharme la mano antes del partido. No puedo entender por qué algunos jugadores del Arsenal me faltaron al respeto", declaró Adebayor, suspendido tres partidos por la Federación Inglesa de Fútbol (FA), que aún no ha juzgado la dudosa celebración de su gol.
"Hay límites en los insultos que un hombre puede aguantar hasta que explota", explicó el togolés, hablando de la actitud de los hinchas londinenses con él. "Me insultaba la misma gente que hace seis meses coreaba mi nombre", añadió al hablar del caldeado ambiente del partido liguero del pasado sábado, que terminó con victoria de Manchester City por 4 a 2.
"Cuando marqué, quise mostrar que no era buena idea insultarme", explicó Adebayor, que fue a festejar su gol frente a la grada reservada a los aficionados del Arsenal, logrando que se enfurecieran. "Corrí llevado por una emoción genuina. Si quitan la emoción al fútbol, habrá un gran problema", dijo.
Criticado abiertamente por algunos de sus ex compañeros, Adebayor aseguró: "No fue culpa mía que me fuera. Fue (el entrenador) Arsène (Wenger) quien quería aceptar la oferta que hicieron por mí".
El español de Arsenal Cesc Fábregas acusó a Adebayor de haberle hecho una entrada peligrosa que "merecía una tarjeta roja" y Emmanuel Eboué, amigo de Adebayor, dijo estar "muy, muy contento" de que haya sido suspendido tres partidos.
(AFP)
