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Caos de seguridad en Belo Horizonte en la previa a Brasil-Uruguay
Además de las voces de aliento que bajen de las tribunas del Estadio Mineirao cuando este miércoles se enfrenten Brasil y Uruguay por las semifinales de la Copa Confederaciones, se espera que a la misma hora también se sientan los gritos de 100.000 manifestantes que saldrán a movilizarse en las inmediaciones del recinto de Belo Horizonte.
Por ese motivo, la Policía sugirió al gobierno de Minas Gerais que cancele el partido, informó el portal de LanceNet.
Un grupo formado por el Ministerio Público Estatal y la Defensoría Pública, entre otros, le recomendó al gobernador de Minas Gerais, Antonio Anastasia, que el encuentro sea suspendido, debido a las posibilidades de que las autoridades no tengan condiciones de asegurar a los ciudadanos.
Como alternativa, ya hubo contactos con el Ejército brasileño por si se debe recurrir a sus servicios para brindar seguridad para que se pueda desarrollar el juego.
La preocupación de las autoridades mayor a la del pasado sábado, cuando en el último encuentro jugado en el Mineirao, entre Japón y México, se manifestaron 70.000 personas. Ahora que jugará Brasil, esperan que haya unas 100.000.
A través de las redes sociales, las organizaciones se han comunicado para organizar la concentración al mediodía y manifestarse luego durante el encuentro que comenzará a la hora 16:00. Anunciaron que será una marcha “pacífica”, pero dieron recomendaciones en caso de que surjan enfrentamientos con la Policía.
