Cocinar con niños

Cocinar con niños es de las cosas más lindas que hay. Creo y considero muy importante esta actividad porque los ayuda a entender el proceso de lo que comemos, a descubrir el trabajo de cada plato y el valor de la comida casera, pero por sobre todo les enseña tener paciencia.

Sí, totalmente. Suelo dar clases para niños y es impresionante ver cómo se interesan, los niños tienen una capacidad de sorprenderse que es única y eso lo reflejan cuando mezclan los ingredientes o cuando ponen colorantes, las habilidades y destrezas se ven cuando decoran, una de las partes preferidas de la clase.

Es importante que ellos vean el comienzo del proceso, ir al supermercado implica armar una lista previa que tiene que ser pensada, está bueno que cuando vayan al supermercado puedan identificar que lo que escribieron está ahí y que hay varias opciones para el mismo producto. Esto los ayuda a entender el valor de calidad y de cierta manera, el valor económico. Lo ideal es hacer que la experiencia de las compras sea lo más didáctica posible, viendo colores del packaging, de los productos o incluso, si el lugar lo permite, tocando los productos.

Este punto siempre es crítico en las casas, el miedo a dejar la cocina sucia aterra a cualquier padre pero en mi opinión, que esto suceda es buenísimo. Creo que es parte de la niñez ensuciarse y los ayuda a diferenciar lo que está bien de lo que está mal y aprender sobre todo a ordenarse, ya que a nadie le gusta tener que dedicar horas a limpiar, así que si ensuciamos menos, el trabajo va a ser mucho más corto. Es enseñarles a ser más cuidadosos. De todas maneras, como experiencia es genial compartir el momento de las manos sucias o de romper el huevo y que se caiga para todos lados, vale la pena pasar por ello.

Hoy en día no es muy común encontrar esto en las casas, pero creo que hay que entender el valor que tiene. Si les enseñamos a comer comida sana y casera desde chiquitos, mantendrán el hábito cuando sean mayores. Hay que explicarles qué contiene cada ingrediente y por qué cada uno es importante en la receta. Por suerte hoy en las escuelas están ayudando mucho con este cambio de hábitos, a la hora de la merienda desaparecieron los productos comprados y chatarras y son sustituidos por frutas o productos elaborados en casa, así que ahora no hay excusas para no meter las manos en la masa.

Siempre intenten encontrar una receta fácil, donde los productos sean amigables a la hora de manipularlos, por suerte hoy en día hay muchos libros para niños que ya tientan solo con las ilustraciones. Es importante que ellos midan los ingredientes así también aplican la matemática a la hora de cocinar.

Si bien yo no soy madre, considero que los adultos tenemos una gran responsabilidad sobre los más chicos, sean sobrinos, hijos de amigas o alumnos, ya que nosotros somos sus maestros y somos parte de esta sociedad en donde cada día hay más obesidad infantil siendo el boom de la comida saludable. Sabemos que cocinar después del trabajo no es una tarea fácil ya que lleva mucho tiempo, pero vale la pena cuando ves el resultado y el orgullo con el que ellos lo presentan en su familia y siempre comen y aprecian más este producto cuando fueron parte del proceso, en el que además aprendieron habilidades que le van a servir para toda la vida como el decidir, el valorar, el saber apreciar, la limpieza y la seguridad.

Cocinar en familia es algo único y un buen hábito para empezar a ponerlo en marcha y qué mejor momento que las vacaciones, dejo acá una receta fácil y rica para que cocinen con los mas chiquitos.

Batir la manteca con el azúcar a blanco, en batidora con globo, agregar la vainilla, los huevos de a uno y la ralladura. Tamizar la harina con el royal e incorporar. Por ultimo agregar chips. Poner la mezcla en papel film y dejar enfriar en heladera por aproximadamente dos horas.

Disponer en chapa en mantecada o sobre placa de silicona, bolitas de masa armadas con las manos dejando un espacio considerable entre una y otra. Hornear por 20 minutos aproximadamente hasta que queden con piso crocante apenas doradas.