Confianza y disfrute, las claves de la Fiera

Diego Aguirre dirigió 16 clásicos en sus tres etapas en Peñarol, 10 de ellos oficiales. El saldo total es de cinco partidos ganados, cinco empatados y seis perdidos. Cuenta Aguirre que "cuando se sortea el fixture es lo primero que vas a fijarte, en qué fecha te toca el clásico", lo define como un partido donde "te jugás gran parte del año".

En cuanto a la preparación previa a un clásico cuenta que no hay fórmulas hechas, hay que tener en cuenta cómo viene el equipo, en qué posición de la tabla, cómo fueron los últimos partidos, todo eso incide en la planificación previa.

"Se respira un clima de tensión. Casualmente los trabajos en la semana salen mal. Es curioso, cuando hacés ejercicios tácticos, situaciones de posicionamientos, o ejercicios donde haya duelos, normalmente los jugadores no están bien por la tensión y el nerviosismo", comenta Aguirre agregando que es algo natural en los jugadores y que "generalmente los rendimientos durante el partido son los que vos esperás".

Además de lo táctico, el aspecto psicológico de los jugadores es algo a prestarle especial atención en los días previos. "Hay una preparación mental que va en cada uno y tenés que darle la tranquilidad y confianza al jugador sabiendo que son partidos que sí o sí tenés que ganar. Pero que también hay que disfrutarlos, porque si te cargás demasiado de presión luego no rendís", dice Aguirre que también advierte de no caer en la ansiedad y "pasarse de manija" para no entrar a la cancha sobregirado.

"¿Cómo preparaba la semana? Trataba de hacer la semana lo más tranquila posible sin generar ninguna situación de nerviosismo extra, no darle demasiadas cargas a los jugadores ni trabajos excesivos dentro de la cancha porque eso puede transmitir inseguridad", resume el exentrenador de Peñarol que en 2003 y 2010 fue campeón uruguayo ganándole las finales a Nacional.

LOS CLÁSICOS DE AGUIRRE