Pintor, grabador, ilustrador, muralista, dibujante. En Guillermo Fernández confluyeron varias aristas que lo llevaron a ubicar un puesto destacado en el mapa artístico local. Desde el pasado jueves 19, el Museo Nacional de Artes Visuales (MNAV) repasa los 60 años de su carrera a una década de su muerte. Las salas 3 y 4 del MNAV comprenden un recorrido que exhibe sus influencias más reconocibles, algunas de ellas adquiridas durante sus estudios en el icónico Taller Torres García, su gran escuela.
Durante su vida, Fernández dictó clases en liceos de San José, Paysandú y también en su taller, que inauguró en 1961 y que continúa abierto y en funciones en la actualidad. Además, fue profesor del propio Taller Torres García, entre 1957 y 1968. Varias de sus obras se encuentran en algunos de los edificios más icónicos del país, como el Palacio Legislativo, el Banco Central y el Banco República. También fuera de fronteras en la Rose Fried Gallery de Nueva York.
Fernández fue contemporáneo y colaborador de artistas como José Gurvich, Francisco Matto y Augusto Torres, hijo de Joaquín Torres García.
La muestra del MNAV, titulada Guillermo Fernández: la travesía de un maestro, presenta varias de las técnicas que formaron parte de su repertorio artístico, entre ellas el dibujo, el trabajo en madera, las ilustraciones para publicaciones, óleos y tintas. Se presentan también objetos y documentos de otras características. Etiquetadas como "reliquias", se encuentran entrevistas, libretas de apuntes y creaciones de artistas que visitaban su taller.
La exposición estará abierta hasta el domingo 18 de enero de 2018. La entrada es gratuita y los horarios de visita son de martes a domingo de 14 a 19.