“Impactos que perduran”: KPMG premió al Hogar La Huella

La organización recibirá una contribución de US$ 5.000 y 15 horas de mentorías a medida por parte de un equipo multidisciplinario de expertos de KPMG. La Huella utilizará el dinero para la instalación de paneles en el marco de un plan de sostenibilidad diseñado por voluntarios de la OSC.

Leandro Iturralde, voluntario de La Huella –que trabaja principalmente en Las Piedras, donde está ubicada–, comentó que este proyecto representa un antecedente a nivel de su institución y además “sienta un precedente a nivel nacional”: “Un proyecto en el que coexisten la atención de problemáticas sociales sin perder de vista aspectos ambientales y energéticos en los que ya se viene trabajando en el país”.

“Tanto el fondo monetario como el mentoreo contribuirán a dar el puntapié inicial del Proyecto de Sustentabilidad que, junto a otros voluntarios, soñamos para La Huella. El premio monetario será destinado a la instalación de paneles fotovoltáicos, de esta manera se disminuye el impacto sobre el medio ambiente al mismo tiempo que se reducen los costos energéticos, lo cual se traduce directamente en una ampliación del alcance de nuestros proyectos”, explicó Iturralde.

En cuanto a las mentorías que brindará KPMG, les permitirá “delinear” un plan con objetivos, estrategias e indicadores “claros” para sopesar el avance del proyecto. “Estamos convencidos que esta iniciativa, si bien tiene sentido en sí misma por el impacto que representa para La Huella, es una oportunidad para demostrar que este tipo de proyectos son viables a nivel social, ambiental y económico”, ahondó con orgullo.

Iturralde está vinculado desde 2019 a La Huella (institución con 49 años de antigüedad), cuando llegó como voluntario, “un rol que tiene como principal objetivo la búsqueda de la ampliación de las redes afectivas y de sostén de los niños, niñas y adolescentes vinculados”.

Foco en lo social

El Socio Director de KPMG Uruguay, Álvaro Scarpelli, señaló que si bien la firma suele realizar distintas acciones vinculadas al mundo de los negocios y al ámbito académico, en esta oportunidad deseaban celebrar sus primeros 75 años en el país con una iniciativa con el foco puesto en lo social, “en línea con los valores de KPMG”.

De este modo, el concurso “Impactos que Perduran” es “una premiación orientada hacia las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC), las cuales cumplen un rol fundamental –aunque muchas veces silencioso– en la comunidad.

“Nos pareció el broche de oro para un año donde tenemos mucho que celebrar y también para agradecer. Qué mejor manera de hacerlo que dándole visibilidad a historias y proyectos sociales que valen la pena ser contados y, sobre todo, apoyados”, comentó.

A la convocatoria se presentaron 48 organizaciones, de las cuales quedaron cinco finalistas que participaron de un pitch final: CEPRODIH, Centro Educativo Los Tréboles, Hogar La Huella, Fundación Bensadoun Laurent y la asociación América-Cimientos Uruguay. “Nos quedamos gratamente sorprendidos por la adhesión que tuvo la convocatoria. Lo que demuestra la verdadera necesidad de que las organizaciones civiles puedan contar con los recursos para mejorar su gestión interna y trabajar en su sostenibilidad”, subrayó Scarpelli.

El jurado de la presentación final estuvo compuesto por KPMG (Scarpelli), Socialab (Carolina Machado, directora de Relaciones Institucionales) y tres organizaciones civiles de referencia como Fundación Teletón (Germán Lombardi, gerente general), Fundación Pérez Scremini (Guzmán Nion, gerente general) y América Solidaria (Javier Pereira, director ejecutivo).

“Fue extremadamente difícil seleccionar cinco finalistas y aún más difícil seleccionar un ganador. Se intentó contemplar diferentes causas, valorando muy especialmente el uso que se le daría al premio. La Huella, que como el resto de los proyectos atiende una causa muy loable, se destacó también por el uso innovador y concreto que le daría tanto al aporte económico, como a las mentorías con nuestro equipo de profesionales”, añadió el vocero de KPMG Uruguay.

Scarpelli, para concluir, hizo referencia a la incidencia de la pandemia del covid-19 en este concurso: “La historia ha demostrado que, en contextos de crisis, las OSC asumen un rol fundamental atendiendo a aquellos más vulnerables y que sufren en peor medida las consecuencias de cualquier shock social. La crisis generada por el covid-19 no es la excepción y como país hemos visto cómo las Organizaciones de la Sociedad Civil, impulsadas en la generosidad colectiva, han contribuido a cerrar la brecha de desigualdad que generan este tipo de situaciones”.