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Ponte a prueba: usa la calculadora que te dice cómo lo que comes y bebes impacta en el ambiente
Evitar la carne y los productos lácteos se considera una de las formas principales de reducir tu impacto en el medio ambiente.
¿Pero cuál es la diferencia entre la carne y el pollo? ¿Un tazón de arroz produce más gases de efecto invernadero que un plato de papas fritas? ¿Es el vino más amigable con el medio ambiente que la cerveza?
Diseño de Prina Shah, desarrollo de Felix Stephenson y Becky Rush.
* Si no puedes ver la calculadora de alimentos, haz clic aquí.
La producción de alimentos es responsable de una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero que contribuyen al calentamiento global, según un estudio de la Universidad de Oxford (puedes ver el estudio en inglés aquí*).
Sin embargo, los investigadores sostienen que el impacto varía enormemente dependiendo de qué alimento se trate.
Sus hallazgos mostraron que la carne y otros productos animales son responsables de más de la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con los alimentos, a pesar de proporcionar solo una quinta parte de las calorías que comemos y bebemos.
De todos los productos analizados en el estudio, determinaron que la carne de res y el cordero causan, por mucho, el efecto más perjudicial para el medio ambiente.
Los hallazgos hacen eco de las recomendaciones del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) sobre cómo los individuos pueden disminuir el cambio climático (puedes leer en inglés las recomendaciones aquí*).
Desencadenante poderoso
El IPCC dice que debemos consumir menos carne, leche, queso y mantequilla, pero también adoptar más alimentos de temporada de origen local.
Consumir menos carne y productos lácteos podría reducir en dos tercios la huella de carbono de los alimentos de un individuo, según el estudio de Oxford, publicado en la revista Science.
"Lo que comemos es uno de los desencadenantes más poderosos de la mayoría de los principales problemas ambientales del mundo, ya sea el cambio climático o la pérdida de biodiversidad", dijo el investigador del estudio, Joseph Poore, a BBC News.
Cambiar tu dieta puede hacer una gran diferencia en tu huella ambiental, desde ahorrar agua hasta reducir la contaminación y la pérdida de bosques, señaló.
"Reduce la cantidad de tierra requerida para producir tus alimentos en aproximadamente un 75%. Eso es una gran disminución, sobre todo si se escala a nivel mundial", explicó Poore.
Tierras deforestadas
También es importante saber cómo y dónde se producen los alimentos, ya que estos detalles pueden propiciar un impacto ambiental muy diferente.
Por ejemplo, el ganado criado en tierras deforestadas es responsable de 12 veces más emisiones de gases de efecto invernadero que las vacas criadas en pastos naturales.
La carne de res promedio de América del Sur produce tres veces la cantidad de gases de efecto invernadero que la carne producida en Europa y utiliza extensiones de tierra diez veces más grandes.
El chocolate y el café que crecen en selvas deforestadas producen gases de efecto invernadero relativamente altos.
Si buscas tomates amigables con el clima, elige aquellos cultivados al aire libre o en invernaderos de alta tecnología, en vez de en invernaderos calentados con gas o petróleo.
Los bebedores de cerveza amigables con el medio ambiente pueden estar interesados en saber que la cerveza de barril es responsable de menos emisiones que la que viene en latas reciclables o botellas de vidrio.
Incluso las opciones de carne más amigables con el clima producen aún más gases de efecto invernadero que las fuentes de proteínas vegetarianas, como los frijoles o las nueces.
¿Cómo hicimos la calculadora?
Joseph Poore, de la Universidad de Oxford, y Thomas Nemecek, de la División de Investigación en Agroecología y Medio Ambiente de Zurich, Suiza, analizaron el impacto ambiental de 40 alimentos que representan la gran mayoría de lo que se come a nivel mundial.
Evaluaron el efecto de estos alimentos en las emisiones de gases de efecto invernadero y la cantidad de tierra y agua dulce usadas en todas las etapas de su producción, incluido el procesamiento, el envasado y el transporte.
Al analizar los datos de cerca de 40.000 granjas, 1.600 procesadores, tipos de empaque y minoristas, Poore y Nemecek pudieron evaluar cómo las diferentes prácticas de producción y la geografía tienen diferentes consecuencias en el planeta.
¿Qué pasa con los tamaños de porción?
El estudio analizó el impacto ambiental de 1 kg de cada uno de los diferentes alimentos.
Para este artículo, los datos se convirtieron al impacto de una porción, según los tamaños de la Asociación Dietética Británica (BDA, por sus siglas en inglés) (puedes ver en inglés el tamaño de las porciones aquí*) y los tamaños de porción de dieta saludable del grupo médico BUPA (puedes ver las porciones aquí*).
Los tamaños de porciones basados en la BDA y BUPA suelen ser más bajas que las porciones de los restaurantes y de lo que la gente normalmente come, por lo que las cifras que arroja la calculadora probablemente sean más bajas que las reales.
El impacto de los alimentos ricos en proteínas se calculó por cada 100 gramos de proteínas de la investigación de Poore y Nemecek y de los datos sobre las proteínas por porción de la BDA, para evitar diferencias entre los alimentos cocidos y los no cocidos.
¿Cómo calculamos los gases de efecto invernadero?
Las cifras de emisiones de gases de efecto invernadero están en kilogramos de compuestos equivalentes al dióxido de carbono (CO2eq).
Esta es una unidad que convierte el impacto de diferentes tipos de gases de efecto invernadero, como el metano y el óxido nitroso, a la cantidad equivalente de dióxido de carbono.
¿Cómo saben a cuántos kilómetros conducidos equivale el impacto anual de mi dieta?
El impacto anual de comer un alimento se calcula multiplicando el impacto de una porción por las veces que se consume en un año, según las porciones semanales declaradas por el usuario.
Luego, este impacto se compara con las emisiones de otros hábitos diarios. La Agencia Europea del Medio Ambiente estima que conducir un automóvil estándar a gasolina produce 245 g de CO2eg/km a lo largo de su vida útil, incluidas las emisiones de la producción del vehículo y la producción de combustible.
El terreno usado al año para producir un alimento se compara con el área de una cancha de tenis, 261 metros cuadrados.
La cantidad anual de agua usada se compara con una ducha, según cifras que sugieren que la ducha promedio dura ocho minutos y consume hasta 65 litros de agua. En los datos solo se incluye el "agua azul", es decir, el agua extraída de ríos o del suelo.
*La BBC no se hace responsable del contenido de sitios externos.
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