La Organización Panamericana de la Salud (OPS) realizó este miércoles un balance de la situación sanitaria de las Américas al concluir el primer trimestre de 2021, del que queda -como seria y grave advertencia- , que la nueva ola de covid-19 que están experimentando los países de América Latina y el Caribe puede ser más extensa que la anterior.
La directora de la OPS, Carissa Etienne, afirmó que hay un "alza de los casos en toda la región, incluso en lugares que parecían haber contenido o evitado los brotes", y advirtió que hay un "riesgo real" de que este auge sea peor que el registrado el año pasado en muchos países.
La conferencia de prensa virtual de la OPS puso el énfasis en dos situaciones coincidentes en la conclusión del primer trimestre del año: la carencia de las vacunas necesarias para la inmunización de la población en la región y, por tanto, la necesidad, casi el ruego, de mantener con celo las medidas de prevención que pueden evitar que se siga propagando el contagio: usar el tapabocas, lavarse las manos y evitar las aglomeraciones.
Etienne, en un momento de su intervención, pidió a la gente de la región "quedarse en casa" y solicitó a los gobiernos ayudar a esas inmensas capas de la población que viven del trabajo informal.
"Sin medidas preventivas, nuestra región podría enfrentarse a un auge más grande que el pasado", indicó.
La directora de la OPS destacó que la se habían distribuido en los últimos 30 días más de 2,6 millones de dosis de vacunas por medio del mecanismo Covax a 17 países de la región y que naciones como Belice, Trinidad y Tobago y Guyana estaban por recibir sus primeros lotes.
El abastecimiento de las vacunas es nuestro reto principal, pero está afectado por las demoras de los fabricantes en escalar su capacidad de producción y por ese nacionalismo vacunal que limita la disponibilidad mundial de los fármacos contra el covid-19.
Etienne dijo que el actual sistema perpetua la inequidad "y eso no es aceptable, porque las vacunas deben estar disponibles para todos, sin importar el lugar donde viven"
Pero en América Latina y el Caribe no son las vacunas lo único que escasea: también falta oxígeno y medicinas anestésicas, insuficientes ante "la "velocidad del contagio en países como Brasil,. Perú y otros",
El subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa, abordó la situación sanitaria en Brasil, con los picos de contagio y muertes no vistos en los anteriores meses de pandemia y lo atribuyó a la movilización de la población durante la navidades y el carnaval y a la relajación de las medidas de salud pública, todo lo cual ha producido un alza del contagio en todas las regiones del país. "El número de muertes en la última semana fue superior a lo visto en Estados Unidos", afirmó.
Barbosa dijo que la variante P1 contribuye al aumento de los casos, porque es más transmisible que el tipo que circulaba en 2020. Confirmó que la P1 está presente, además de Brasil, en ocho naciones sudamericanas (Argentina, Chile, Perú, Uruguay, Paraguay, Colombia, Venezuela y Guayana Francesa), en las tres naciones de América del Norte, en el Caribe francés y holandés y en Panamá
Los países que no monitorean de cerca sus indicadores y que no ajustan sus medidas de salud pública están en riesgo de enfrentarse pronto a una carga muy grave en sus sistemas de salud, con unidades de cuidado intensivo abrumadas.
La OPS informó que hasta el momento se han reportado más de 19,7 millones de casos de covid-19 y 475.000 muertes en América, con al menos una de las tres variantes de mayor preocupación identificadas en 32 países y territorios de la región
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