Si alguien se dirigiera a una galería de arte con un maletín conteniendo muestras con el virus del ébola, el virus de la gripe aviar, el hantavirus, el virus del dengue, el VIH, o un virus de fiebre hemorrágica, es muy probable que termine rodeado por agentes de la cuarentena. Un brote de estos virus podría ser catastrófico para nuestros cuerpos, ya que pueden utilizar la maquinaria de las células de nuestro organismo para sus propios fines. Sus tocayos cibernéticos, los virus de computadora, fueron nombrados así por funcionar de forma similar al tomar control de los sistemas, pero en principio no supondrían un mal mayor para los organismos humanos. ¿O sí? Para el artista chino Guo O Dong ambos virus, los biológicos y los virtuales, son igualmente peligrosos y con consecuencias igual de materiales.
Su obra "The Persistence of Chaos" (La Persistencia del Caos) consiste en una vieja laptop Samsung NC10 del año 2008 infectada con seis de los virus de computadora más peligrosos de la historia (ILOVEYOU, MyDoom, SoBig, WannaCry, DarkTequila y BlackEnergy). Para evitar cualquier tipo de contagio, la computadora se encuentra aislada de cualquier tipo de conexión, ya sea por wi-fi, bluetooth o por pendrive. Subastada por más de US$ 1 millón, la obra busca, según su creador, transformar en físicas aquellas amenazas que normalmente se mantienen como abstractas. "Tenemos la fantasía de que las cosas que suceden en las computadoras no pueden realmente afectarnos, pero esto es absurdo", dijo Guo O Dong a The Verge. "Los virus armados que afectan las redes eléctricas o la infraestructura pública pueden causar daños directos", agregó.
Los virus fueron seleccionados por la magnitud de los daños económicos que causaron. En efecto, los seis juntos representaron en los últimos 20 años pérdidas empresariales de más de US$ 95 billones. El virus "ILOVEYOU" (Te amo), un malware que, irónicamente, se volvió viral en el año 2000 y que solía llegar al correo electrónico en forma de una carta de amor, afectó a más de 50 millones de ordenadores y significó pérdidas de US$ 5.500 millones. Por otro lado, WannaCry (Quiero llorar) atacó en 2017 a computadoras en fábricas y hospitales y es para el artista uno de los ejemplos más claros de lo que quiere expresar con su obra. "WannaCry causó al Servicio Nacional de Salud del Reino Unido el equivalente a $100 millones en daños y llevó a la cancelación de decenas de miles de citas médicas", dijo Dong. "No es exagerado decir que esto causó un daño humano significativo, aunque podría ser difícil identificar los efectos exactos en el paciente", agregó.
La pieza se encuentra a cargo de la empresa de ciberseguridad DeepInstinct y actualmente se está subastando en línea. La evolución de esta potencial amenaza puede seguirse en vivo por streaming, una "obra" que Guo O Dong considera como "Una especie de bestiario; un catálogo de amenazas históricas".
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá