Serena Williams estuvo al borde de la muerte luego del nacimiento de su hija

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"Cuando estoy demasiado ansiosa pierdo partidos. Y siento que mucha de esa ansiedad ha desaparecido cuando nació Olympia. Saber que este precioso bebé me está esperando cuando llego a casa me hace sentir que no tengo que jugar otro partido. No necesito dinero, títulos o prestigio. Los quiero, pero no los necesito. Este es un sentimiento distinto para mí", contó Serena Williams en la entrevista con la revista y que recogió La Nación.

Pero cuando nació su hija, la vida de la tenista estadounidense estuvo en riesgo. "Casi me muero después de dar a luz", explicó. "Tras un embarazo fácil mi hija nació por cesárea de emergencia, al bajar drásticamente su ritmo cardíaco durante las contracciones. La intervención estuvo bien. Tener a Olympia entre mis brazos fue la experiencia más increíble que ha sentido en mi vida. Pero lo que sucedió pasadas 24 horas del parto fueron seis días de incertidumbre", contó Serena.

Esto se debió a una embolia pulmonar que le provocó una fuerte tos que hizo que los puntos de la cesárea se abrieran. "Los médicos encontraron un gran hematoma y sangre coagulada en mi abdomen, por lo que tuve que volver a operarme para evitar que los coágulos fuesen a mis pulmones".

Luego de que pasara lo peor, Williams agradeció a los médicos que le salvaron la vida: "Tengo la suerte de haber sobrevivido... Los médicos sabían exactamente qué hacer ante cada situación. Si no fuera por su cuidado profesional, hoy no estaría aquí".