Ernesto Scayola, director ejecutivo de Consultoría de EY

Economía y Empresas > EXPERTO

Robots de software para lograr ventajas competitivas

El director ejecutivo de Consultoría de EY Uruguay, Ernesto Scayola, explica cómo y para qué sirven los procesos de transformación existosos
Tiempo de lectura: -'
25 de abril de 2018 a las 05:00
Ernesto Scayola es director Ejecutivo de Consultoría en EY y una de sus tareas en los últimos tiempos es acompañar a empresas en el "viaje" de transformación que implica incorporar automatización de procesos empresariales por medio de robots de software. Se trata de un software que, basado en reglas, emula ciertas actividades humanas, trabaja 24/7 usando los sistemas ya existentes. La idea es aplicarlo en tareas repetitivas o estandarizadas, lo que deja disponibles horas/hombre para tareas que agreguen valor.
 
Para Scayola resulta importante que esta automatización no se mire solo como un proyecto tecnológico o dirigido a reemplazar empleados; sino que pueda llevarse adelante como un proyecto de negocio en la que los robots son un complemento de la función humana, y que están llamados a transformar los modelos operativos de las empresas.
 
Considera que este tipo de automatización, que ya ha empezado a aplicarse en Uruguay, es un camino de ida y que no hay mucha chance de no incorporarla si se quiere ser competitivo. A continuación un resumen de la entrevista con Café y Negocios.
 
¿Qué es un robot de software?
Es un software que emula lo que hace el empleado sentado en una computadora. Por ejemplo repetir una tarea de entrar a internet, descargar una factura, entrar al sistema y contabilizarla, y después mandar un mail. Una de las ventajas tiene que ver con sacar al humano de tareas repetitivas y que no aportan valor, y disponer ese tiempo para tareas más analíticas, que realmente requieran de capacidad de juicio. Cuando una empresa compra una licencia (en general en sistemas de suscripción anual), adquiere 24 horas del uso del robot. Hay herramientas gratuitas y otras (que pueden llegar) en el entorno de US$ 12.000 por robot por año.
 
Existe el temor de que esto conlleve una reducción de personal...
Vemos, en general, que las empresas no lo piensan por el lado de reducir sino por el de ganar eficiencias al interior de la estructura actual. En cualquier proyecto de este tipo tiene que haber una adecuada gestión del cambio. La gran mayoría de las empresas de Uruguay tienen necesidad de más gente. Hay ciertas actividades que podrían aportar más valor como el análisis de datos, y que no las hacen porque no tienen tiempo.
 
¿Qué tareas son robotizables?
Es mayormente tarea de back office, lo que hace la organización hacia adentro como contabilidad y pago a proveedores; pero también en atención a clientes. A veces se mezcla con los chatbots y eso es otra cosa. Por ejemplo, se podría recibir determinadas solicitudes de clientes que sean procesadas por un robot. A veces pasa que un cliente carga una información en una página web de una empresa, y después hay un proceso manual de pasar eso al sistema central.
Ese pasaje lo puede hacer perfectamente un robot. Cuando se automatiza se reducen los tiempos de respuesta.
 
¿Qué rol juega EY?
No vendemos licencias del software. Hay distintos proveedores. Nosotros podemos ayudar a identificar qué puede ser más conveniente. Acompañamos a la empresa durante todo el proyecto de transformación. En el fondo implica un cambio en la forma de trabajar, y es una oportunidad muy buena para lograr eficiencias desde el punto de vista de los procesos internos e incluso externos de cara al cliente. Primero analizamos los procesos y vemos las oportunidades de robotización. Hay algunos procesos que son más factibles de robotizar o generar un mayor beneficio. Vemos qué parte del proceso tiene sentido robotizar y los ordenamos en un ranking de prioridades. Eso requiere todo un proceso de comprensión. Luego recomendamos hacer un caso de negocio; poner en negro sobre blanco cuales van a ser los beneficios de implementar la tecnología y cuales las ganancias, que podrían ir por ahorro de horas/hombre pero también en mejora en la calidad de los datos y eficiencias. Por ejemplo, cuando hay que digitar cierta información la probabilidad de error se calcula en un 8-10%. Con el robot es cero.
 
¿Cual es el impacto en el trabajo?
Lo que se va a tener es la tecnología trabajando a la par de las personas para ciertos procesos. La idea es lograr una complementación: el robot hace la parte rutinaria y que no aporta valor, y la persona la parte analítica.
 
En la medida que esto crece uno tiene que generar todo un modelo de gobierno de los robots. El día de mañana hay que saber si se cambia determinado sistema si impacta en los robots. Pero también hay que definir responsables, porque si algo funciona mal no se le puede echar la culpa al robot. Lo que decimos siempre es que esto más que un proyecto de tecnología es un proyecto de negocio, que va a impactar en toda la organización. No se puede hacer sin estar alineado con Recursos Humanos y con Sistemas. Hay que entender el impacto en los procesos y también aprovechar las oportunidades para mejorarlos.
 
¿Qué le dicen los empresarios?
Ven que la automatización es una tendencia que está afectando a los modelos operativos de las empresas. Lograr incorporar automatización dentro de la empresa es una de las maneras de generar ventajas competitivas. Muchas veces esto entra por el lado de la posibilidad de reducir costos. Nosotros hacemos énfasis en que no es solo eso: es mejorar en eficiencia, reducir errores, lograr una atención al cliente más rápida.
 
No se vislumbra una organización gobernada por robots. Hay que lograr una integración y transformar también a las personas. Si tenías una persona en un cargo analítico pero que en la práctica lo único que hacía era ingresar facturas, es una tarea por definición que puede hacer un robot. La pregunta del millón es: ¿qué hago con la persona?. O la capacito y la llevo a que pueda realizar otras tareas o la reubico en otros procesos.
 
Esta moneda tiene dos caras: la empresa debería ayudar a sus empleados a transformarse, sin duda; pero también la persona tiene que estar dispuesta a transformarse. Siempre quedan cosas que requieren de cierto juicio, y requieren personas atrás. No todo va a ser robotizado.
 
¿Las empresas tienen opción de no adoptar esta tecnología?
Que la tecnología modifique modelos operativos en las empresas no es algo nuevo. Viene pasando desde la revolución industrial. Lo nuevo es una velocidad de cambio mucho mayor. Antes se decía que en Uruguay todo llegaba diez años más tarde. Ahora no, esto ya está pasando acá. Quizás estamos un año atrás que otros lados, pero no son diez. El día de mañana, en este mundo globalizado y tecnologías convergentes, van a tener que competir con empresas que lo está haciendo.
En definitiva, la automatización en sí es un camino de ida. No hay mucha alternativa. Las empresas de una u otra manera la tienen que incorporar, si quieren perdurar en el tiempo.
 
 

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...