El policía Mario Félix Scola fue asesinado de cuatro disparos este fin de semana en el cuarto de su casa, en Casavalle, informó Subrayado. Su esposa y su hijo declararon como indagados y quedaron en libertad, mientras una decena de personas continúan en calidad de indagados y están siendo interrogados por la Justicia, informaron fuentes policiales a El Observador.
El agente trabajaba en la Seccional 26 de Paso Carrasco, Canelones, y tenía una extensa carrera dentro de la Policía. A la hora 23 del domingo, la Policía se presentó en la casa del agente, que presentaba tres disparos en el tórax y uno en un brazo. Su arma de reglamento no ha sido encontrada.
Entre los indagados por la jueza Blanca Rieiro, que investiga el homicidio, hay familiares y vecinos.
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