Las perspectivas para los negocios de reposición de hacienda son buenas a corto plazo, dijo a El Observador el rematador Juan Carlos Martínez, quien dijo que para ello contribuirán la tendencia de mejoría en el precio del ganado gordo y la inminente instalación de la primavera.
"La recuperación de valores en el gordo va a arrastrar a los de la reposición y eso, más el estímulo que habrá cuando aparezca el forraje, vendrá muy bien", indicó.
En la feria ganadera que ayer desarrolló este rematador en el local Cuchilla de Silvera, en Lavalleja, "se operó con una flechita para arriba, en todas las categorías", dijo. Debido a la adversidad climática que hubo este año, todavía en esa zona los ganados en general están muy sentidos, por lo cual no es sencillo comercializarlos.
"El mercado igual estuvo muy ágil, con ventas totales para los 850 vacunos, 400 lanares, 17 toros y siete equinos", informó.
Este lunes en una feria ganadera en Lavalleja se colocó el 100%, en forma ágil y con precios al alza.A propósito de la reposición, considerando valores al bulto que es como se opera en la feria, los terneros más chicos, de menos de 100 kilos, lograron de US$ 230 a US$ 240; otros ya más pesados anduvieron en US$ 280 a US$ 320; y una ternerada entera muy buena, por encima de los 200 kilos, logró US$ 452.
Los novillos de 2 años, un ganado flaco, pero de buena clase, en el eje de los 260 kilos, lograron US$ 507.
En el caso de los vientres, se vendieron ganados con garantía de preñez, vacas cruza
Brangus, a US$ 520; de una liquidación de un ganado muy sentido las vaquillonas con preñez se vendieron en US$ 400; y 150 vaquillonas de dos años fueron de US$ 358 a US$ 397.
Finalmente se vendieron 17 toros Aberdeen
Angus, rústicos, de cabaña Guazuvirá, a US$ 2.208 de promedio, y siete
Criollos –un padrillo y seis yeguas– que promediaron US$ 750.