Cautela en el mercado de compraventa de campos

El operador indicó que hace unos meses se concretaron algunos negocios y en estos días se están cerrando dos o tres más. Señaló que en abril un campo agrícola se vendió en US$ 9.250 por hectárea, en tanto los campos ganaderos buenos se venden a precios que se ubican entre US$ 3.000 y US$ 4.000, mientras los que son totalmente ganaderos, del basalto, se venden por debajo de US$ 3.000.

Confirmó además que las empresas forestales están interesadas en comprar campos pero no han encontrado oferta. “El mercado está más lento pero sigue en actividad”, resumió.

Arrendamientos
En cuanto a los arrendamientos señaló que sigue habiendo buena demanda pero que la oferta sigue escasa. “Cuando aparece algún campo en oferta y se coloca rápidamente”, indicó.

Recordó que los arrendamientos agrícolas generalmente se hacen entre marzo y junio, para preparar los campos con tiempo para la siembra de soja. Dijo que el Plan de uso y manejo de los suelos aún no tuvo un impacto en el mercado, y que puede pasar que a partir del año que viene aparezcan campos mejorados que dejarán de ser agrícolas para pasar a la producción ganadera.

“En determinadas zonas del país la agricultura se hacía con muchas limitaciones pero la tonelada de soja valía US$ 500, con la soja a estos precios la ganadería compite bien, sobre todo si se hace con un buen manejo.

Los campos ganaderos buenos se arriendan a precios que se ubican entre US$ 90 y US$ 120 por hectárea. Victorica informó que en estos días se está cerrando un negocio a US$ 115/ha y también hay negocios por US$ 70/ha y US$ 90/ha, dependiendo de la calidad del predio. Los motivos de arrendamiento varios y dependen de los intereses de sus dueños.