Las autoridades del Sistema de Reponsabilidad Penal Adolescente (Sirpa) clausuraron ayer el Centro de Privación de Libertad (Ceprili), una de las cárceles de menores cuestionadas por organismos nacionales por sus condiciones de reclusión. Los 20 adolescentes infractores que permanecían en Ceprili fueron trasladados al nuevo centro de detención ubicado en Bulevar Artigas y General Flores, informó el director del Sirpa, Ruben Villaverde, a El Observador.
El cierre de este centro se concreta al finalizar la gestión de Villaverde y en un momento en el que continúan los cuestionamientos. Una representante de la Organización Mundial Contra la Tortura, Patricia Barbara, dijo a La Diaria que centros del Sirpa inaugurados recientemente están “destruidos” y que Villaverde debía renunciar.
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