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Colombia y las FARC, el fin del conflicto más antiguo de América
Ambas partes se reunirán hoy en La Habana para el cese al fuego bilateral y definitivo
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23 de junio de 2016 a las 05:00
El gobierno de Colombia y las FARC anunciaron ayer un acuerdo para el cese al fuego bilateral y definitivo y otros aspectos sobre el fin de un conflicto armado que, con medio siglo de historia, es el más antiguo del continente.
El contenido del acuerdo se dará a conocer hoy en La Habana en un acto oficial de alto nivel al que acudirá el presidente Juan Manuel Santos.
"Hemos llegado con éxito al Acuerdo para el Cese el Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo", indicaron los negociadores del gobierno y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en un comunicado conjunto leído en la capital cubana por el guerrillero Marco León Calarcá (alias de Luis Alberto Albán); y Marcela Durán, jefa de comunicación del equipo de paz del gobierno.
El acuerdo incluye otros aspectos fundamentales para el fin del conflicto en Colombia como que la guerrilla dejará las armas, las garantías de seguridad, lucha contra el paramilitarismo y sus redes de apoyo, y la persecución de las conductas criminales que amenacen la implementación de los acuerdos y la construcción de la paz.
Aunque el texto y los detalles no se conocerán hasta hoy, el acuerdo consiste en una "hoja de ruta" o cronograma sobre los pasos y condiciones para hacer efectivo ese cese al fuego bilateral y definitivo, cuya puesta en vigor, por tanto, no será inmediata, de acuerdo con fuentes cercanas a la negociación.
Quedan por cerrar además otros aspectos relativos al punto sobre el "Fin del Conflicto" como el plan de reinserción de los guerrilleros, así como el capítulo previsto en la agenda de los diálogos para implementar y refrendar los acuerdos.
En cualquier caso, se trata de un acuerdo fundamental para despejar el camino hacia la paz en Colombia y por ello se dará a conocer hoy en La Habana, con un evento de alto perfil presidido por Juan Manuel Santos y Rodrigo Londoño, alias "Timochenko", el líder máximo de las FARC, junto al presidente de Cuba, Raúl Castro, y el canciller de Noruega, Borge Brende, los dos países garantes del proceso de paz.
También viajarán a La Habana para ese acto los presidentes de Venezuela y Chile, Nicolás Maduro y Michelle Bachelet, respectivamente, cuyos países han actuado como acompañantes de los diálogos de paz.
Como invitado especial, asistirá el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, acompañado de los presidentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y el de la Asamblea General.
Este sustancial avance en los diálogos colombianos llega tres meses después de que las partes no lograran cumplir con la fecha del 23 de marzo de 2016 para la firma de la paz, anunciada en setiembre de 2015 en La Habana por Santos y "Timochenko", cuando se logró cerrar el acuerdo sobre la justicia transicional para los responsables del conflicto.
El acuerdo en torno al cese el fuego bilateral y definitivo despeja ahora el camino para la posterior firma de un acuerdo definitivo de paz.
Hace unos días, el presidente de Colombia estimó que las negociaciones con la guerrilla podrán concluir el próximo 20 julio, una significativa fecha al ser el día en que se conmemora la independencia del país suramericano.
Desde que en noviembre de 2012 comenzaron las conversaciones de paz entre el gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC -que tienen su sede permanente en La Habana- las partes han llegado a acuerdos parciales sobre la cuestión de la tierra, participación política y erradicación de cultivos ilícitos.
También sobre el reconocimiento y reparación de las casi ocho millones de víctimas que ha dejado el conflicto en su más de medio siglo de historia.
Mujica: error garrafal no aprovechar esta chance
El expresidente uruguayo José Mujica se mostró ayer entusiasmado por el acuerdo alcanzado entre el gobierno de Colombia y las FARC y consideró que no aprovechar esta oportunidad para la paz sería "un error garrafal". "Se beneficiarán todos", afirmó en declaraciones a EFE. A su juicio, la paz es "una gran oportunidad" para toda Colombia y para el conjunto de la región latinoamericana, un lugar donde a veces surgen diferencias o "conventillos", pero donde todos "hablamos castellano".
Mujica recordó que al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aún le quedan algunos obstáculos, especialmente la convocatoria al referéndum al que quiere someter el acuerdo, y advirtió de que se puede topar con dificultades "porque hay fuerzas en el país que están en contra". "Al gobierno colombiano no le ha ido bien en otros aspectos. Su frente interno puede estar dividido", apuntó.
Bayardi: "Alegría" para Latinoamérica
El acuerdo del cese al fuego entre el gobierno de Colombia y las FARC es "una alegría" para América Latina, dijo el uruguayo José Bayardi, exdelegado de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en el proceso de paz entre esos actores.
"Esto irá no solo al beneficio de Colombia, por lo cual no solo es una alegría para ese país sino para toda América Latina. Es un avance muy importante el que se ha logrado ahora y esperamos que esto permita firmar definitivamente el acuerdo de paz", manifestó en declaraciones a la agencia EFE.
Bayardi añadió que una vez que se conozcan los detalles del acuerdo, que se llevará a cabo en La Habana entre el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y representantes de las FARC, Uruguay participará como observador junto a otros países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac).
Asimismo, destacó que la Organización de Naciones Unidas (ONU) designará una Misión Política especial que hará seguimiento a los avances entre los actores para lograr el acuerdo de paz definitivo.
"La Celac había tomado una resolución de concebir el continente como zona de paz, y creo que este es un aporte muy importante poniendo fin a un conflicto que tenía más de 50 años y que era de alguna manera un compromiso de todos", precisó Bayardi.
Bayardi formó parte del equipo designado por Unasur para participar en las negociaciones del cese al fuego bilateral colombiano entre agosto y diciembre de 2015.
