Convocarán a Asamblea General para designar ministros de Corte

Los representantes de todos los partidos políticos avanzaron en las negociaciones para completar las vacantes que están a punto de generarse tanto en la Suprema Corte de Justicia (SCJ) como en el Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA). Se acordó que la jueza Rosina Rossi, ministra del tribunal de apelaciones y profesora de derecho laboral en la Universidad de la República, ocupará la vacante que dejó Jorge Larrieux al retirarse de la Corte en noviembre pasado, como informó el semanario Brecha.

Pero las negociaciones continúan para definir los cargos de los ministros que deberán ingresar en todo el período, ya que se generarán varias vacantes más. En mayo, abandonará su cargo Ricardo Pérez Manrique, al tiempo que en 2018 le llegará el turno a Felipe Hounie. Los jerarcas de la Corte están obligados a abandonar su cargo cuando cumplen 70 años de edad o diez años en el cargo.

El TCA también sufrirá modificaciones, ya que Alicia Castro dejará el organismo y el Senado deberá nombrar un sustituto. Según habían acordado los partidos, Castro pasaría a la Corte al retirarse Larrieux pero debido a que en un año se jubilará, el Frente Amplio le quitó el apoyo político. Los representantes políticos fijaron febrero como la fecha máxima para definir los relevos.

La senadora frenteamplista Lucía Topolanksy informó ayer a El Observador que la intención es aprovechar las interpelaciones que asoman para febrero para convocar una sesión de la Asamblea General y definir los cambios a realizar en la integración tanto de la SCJ como del TCA.

Entre los senadores que participan de las negociaciones están: Pedro Bordaberry y José Amorín por el Partido Colorado, Pablo Mieres del Partido Independiente, Lucía Topolansky, Mónica Xavier y Constanza Moreira, del Frente Amplio, así como los blancos Alvaro Delgado, Luis Alberto Heber y Carlos Camy.

Para designar a un ministro de la Suprema Corte de Justicia, se requieren dos tercios de los votos de la Asamblea General.

En caso de que los representantes de los partidos políticos no lleguen a un acuerdo durante la negociación en un plazo de 90 días, la vacante generada es llenada con el ascenso del ministro del Tribunal de Apelaciones con más antiguedad. Siguiendo ese criterio, el primero que aparece en la lista es Eduardo Turell, seguido por Beatriz Fiorentino y Selva Klett. Luego aparece Bernadette Minivielle y Luis Tosi.

De concretarse la designación de Rossi, se dará un hecho histórico: dos mujeres ocuparán el máximo órgano judicial. Cómo máximo hubo una sóla ministra entre los cinco cargos de la Corte.