La reelecta presidenta Cristina Fernández asume este sábado su segundo mandato en una ceremonia en que estarán ausentes varios líderes de la región mientras se mantienen reserva sobre detalles del acto de juramento.
Fernández, de 58 años, y el vicepresidente Amado Boudou prestarán juramento en el Congreso a las 12.00 hora (1500 GMT), tras lo cual la mandataria pronunciará su mensaje ante la Asamblea Legislativa.
Más tarde se trasladará a la Casa de Gobierno para saludar a las delegaciones extranjeras y poner en funciones al nuevo gabinete de ministros, según lo informado oficialmente por el gobierno.
Confirmaron su presencia los presidentes de Brasil, Dilma Rousseff; de Uruguay, José Mujica; de Bolivia, Evo Morales; de Chile, Sebastián Piñera; de Paraguay, Fernando Lugo; de Guatmala, Álvaro Colom; y de Honduras, Porfirio Lobo. Varios otros líderes latinoamericanos faltarán a la cita.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez canceló su viaje debido a la situación de emergencia que vive su país a causa de las lluvias. Por ese mismo motivo, el presidente colombiano Juan Manuel Santos también canceló el viaje a Buenos Aires.
Los mandatarios de Ecuador, Rafael Correa, y de Perú, Ollanta Humala, no asistirán y en su lugar enviaron a sus cancilleres. Ambos adujeron motivos de agenda interna.
En representación de España estará el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, y por Estados Unidos la secretaria de Trabajo, Hilda Solís, y el asesor presidencial para el hemisferio occidental, Daniel Restrepo.
Si bien los aspectos generales de la ceremonia de asunción fueron difundidos por la presidencia argentina, todavía se mantienen en secreto los detalles de la toma de juramento y entrega de atributos presidenciales a Fernández, para su nuevo periodo hasta el 2015.
El saliente vicepresidente Julio Cobos, distanciado de Fernández desde hace dos años, es quien debe tomarle juramento a la presidenta, según lo fija la Constitución. Pero ésta no especifica cómo y es en este punto en el que la presidenta tendría planeado leer en voz alta el texto de su propio juramento con la presencia de su compañero de fórmula en las elecciones de 2007.
Funcionarios del gobierno y dirigentes del oficialista Frente para la Victoria -corriente de centro-izquierda dentro del peronismo - reclamaron a Cobos que se abstuviera de participar de la ceremonia, pero la presidenta puso fin a la polémica y cumplirá con lo que indica la ley.
El vicepresidente es considerado un "traidor" por los oficialistas luego de que a mediados de 2008 votó en el Senado contra un aumento en el impuesto a las exportaciones de granos impulsado por Fernández y que había desatado una rebelión de productores agropecuarios.
El otro aspecto que aún no fue revelado se refiere a la entrega de los atributos presidenciales, la banda y el bastón presidencial, el cual fue diseñado por el orfebre Juan Carlos Pallarols. Al parecer lo harán los hijos de Fernández, Máximo y Florencia, aunque esto no fue oficializado.
La jornada concluirá con un festival musical frente a la histórica Plaza de Mayo, junto a la Casa de Gobierno.
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