Según publicó el sitio Mashable, el muñeco, que es una creación original de la casa, fue un pedido especial que realizó un cliente para una torta de cumpleaños. Luego de subir la foto a las redes, la confitería comenzó a recibir una catarata de comentarios de clientes y usuarios que reclamaban se borrara la imagen porque la encontraban ofensiva.
"Estábamos especialmente orgullosos de nuestro trabajo tan artesanal, por eso subimos la foto a las redes tal como hacemos con muchos otras tortas y diseños gastronómicos", dice el comunicado.
Luego, Freeport volvió a compartir la imagen reafirmando su postura a pesar de las críticas e invitó a todos sus seguidores en Facebook a compartirla en contra de los prejuicios sociales.