Entre la euforia y el desamor

Sobre las 21.30 se apagaron las luces, y las más de 5.000 personas que se hicieron presentes en el Teatro de Verano comenzaron a atravesar un show que transitó por momentos opuestos, pero que contó siempre con la correcta y afinada presencia de las hermanas Hanna Nicole Pérez Mosa y Ashley Grace Pérez Mosa, quienes fusionaron sus nombres y mostraron cómo la complicidad entre ellas compra rápidamente a sus seguidores.

Los primeros acordes fueron de la canción "Soy Mujer", y con ellas ingresando al escenario se desataron los gritos y las cámaras de celulares encendidas para grabar el instante en el que iniciaban la presentación ante un público que durante 100 minutos no dejó de cantar, bailar e interactuar con la simpatía y espontaneidad de las jóvenes, quienes no dieron pausa a sus músicos, todos conformando un conjunto que no descuidó detalle alguno en su show.

"Buenas noches. Para nosotras es un honor estar en Montevideo, Uruguay. Queríamos estar acá", fue el saludo de las hermanas luego de cantar la tercera canción, ya con sus fans conectados directamente con el espectáculo. Ese instante de bromas entre ellas pero también de agradecimiento para el trato que recibieron en la estadía en Montevideo. El show avanzó y llegaron las canciones más populares de su último trabajo, entre ellas "Me entrego a ti" y "Lo aprendí de ti", temas presentados por Ashley, quien confesó que después de su última ruptura amorosa.

Entre los momentos emotivos de la cita se destacó "Qué hago Yo" (canción que pertenece a la cantante Soraya, fallecida en mayo de 2006). Allí Hanna recordó a la intérprete colombiana, a quien agradeció las enseñanzas y apoyo que brindó al grupo en el año 2005. Nacidas en el estado de Louisiana -Estados Unidos- pero radicadas desde niñas en México, comenzaron su carrera en el año 2002 con el lanzamiento del sencillo "Odio amarte".

Ya en el tramo final del concierto las hermanas comentaron su satisfacción por la visita a Uruguay, país del que destacaron su comida, al expresar: "Aquí probamos la mejor parrilla de nuestras vidas". Las luces se apagaron y llegó el primer tema de despedida, y mientras ellas se retiraban bajaba el tradicional grito del público pidiendo una más. "¡Uruguay, Uruguay!", coreó la gente cuando ambas hermanas retornaron al escenario con la camiseta de la selección nacional, y entonando las primeras palabras del tema "Perdón, Perdón", su letra más conocida hoy, siendo seguramente este el instante más romántico de la noche.

Las chicas brindaron un recital compacto, complementándose en todo momento y mostrando que son un dúo con buenas voces que logran destacarse tanto juntas como separadas, y que son la nueva cara del pop-rock mexicano, con interpretaciones que pasean desde el amor y felicidad al sufrimiento, la angustia y la decepción.

"Esperamos regresar en una segunda oportunidad", dijo Hannah con una bandera uruguaya en la mano, antes de tocar "Estés en donde estés", la canción que cerró un show que en general dejó una buena imagen y que cumplió con la premisa de las cantantes: "Estamos acá para que la pasen bien".