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FA se mete en las redes y enfrenta dilema ético por el uso de datos
Juntarán información de cuentas de Facebook y Twitter de sus adherentes y seguirá los temas que tratan
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26 de junio de 2017 a las 05:00
La adquisición por parte del Frente Amplio de un software denominado Quilt para gestionar información de sus adherentes y hacer un seguimiento en tiempo real de los temas tratados en las redes sociales, expone al partido de gobierno al debate ético sobre el uso de datos en la era de las tecnologías de la información.
La llegada de una herramienta que se asume como necesaria, pero a la que están poco acostumbrados a usar en el oficialismo, abrió interrogantes en la izquierda.
"¿Qué dilemas éticos le generan a la izquierda utilizar estas herramientas que implican manipulación y engaño?", preguntó el exjefe de gabinete del Ministerio de Transporte, Andrés Copelmayer, durante una conferencia organizada el 6 de junio por el Frente Amplio para hablar sobre distintas herramientas de información y comunicación.
Aunque la coalición de izquierda utilizará la información para tomar decisiones políticas, en el partido de gobierno aseguran que el uso de datos se hará bajo determinados parámetros éticos y que solo usará aquello facilitado por sus adherentes.
El sistema Quilt carga en un mismo programa el nombre del adherente, donde vive, su contacto y sus mensajes en Facebook y Twitter, de modo de poder sistematizar reclamos y al mismo tiempo cruzar datos de gente que vive en la misma zona para luego poder sacar conclusiones, explicó a El Observador el secretario político del Frente Amplio, Gonzalo Reboledo.
El dirigente socialista, Santiago Soto, contó a El Observador que se trata de "una herramienta de gestión de datos" que entre otras cosas permite georefernciar los datos electorales, las características de los circuitos y dónde están los adherentes.
El software tendrá un comité de gestión encargado de cruzar los datos recabados y un protocolo para fijar pautas a los distintos sectores sobre cómo utilizar la información.
Luego de aprobar la compra del software en la Mesa Política del viernes 16, el Frente Amplio asumió el uso "ético" de la herramienta. "Hay una prevención ética con respecto al uso de esta herramienta. La prevención que nosotros tenemos es que usamos los datos que los compañeros nos dan para que usemos", dijo Reboledo.
El dilema
En el evento organizado por el Frente Amplio el tema de la ética en el uso de la herramienta fue analizado por el presidente de la coalición de izquierda, Javier Miranda, que fue uno de los disertantes junto al doctor en matemática y experto en bigdata, Ricardo Mansilla.
"Más allá de que me guste o no me guste esto es una realidad. Yo tengo un sistema de comunicación que hoy está funcionando y que permite utilizarse como herramienta política y que sin dudas plantea dilemas éticos. Creo que está bueno que la izquierda se plantee los dilemas éticos porque en definitiva se plantea qué tipo de sociedad nosotros queremos construir. Porque esto es una tentación", dijo Miranda.
El presidente del partido de gobierno argumentó que el instrumento no debe ser utilizado solo como una herramienta electoral sino que debe permitir al oficialismo "interpretar" la realidad para luego tomar decisiones políticas que supongan mejoras para la ciudadanía.
Consultado por El Observador, uno de los vicepresidentes del Frente Amplio, José Carlos Mahía (Asamblea Uruguay), opinó que "el tema de la privacidad y demás asuntos hacen a discusiones más globales que van mucho más allá del Frente Amplio".
La herramienta
Reboledo insistió acerca de que el oficialismo solo tomará los datos que aporten sus adherentes para trazar futuras estrategias políticas.
"Vos tenes un compañero que vive en la Unión que está caliente en Twitter o en Facebook con el alumbrado público. Entonces el sistema lo registra. Tenemos 400 mil afiliados y 300 comité de base. Es una linda base de datos", sostuvo.
"Que nosotros podamos tener información de que los tipos dicen 'lo que pasa que acá el Frente Amplio hace seis meses que no viene' nos sirve. O poder identificar que el Frente Amplio debería trabajar en los barrios el tema de la transparencia. De repente te lo dicen diez en una misma zona y decís bueno, acá hay que hacer una charla por este tema. Es una forma de tener el pulso, ver qué es lo que los compañeros están reclamando y poder estar en sintonía", abundó Reboledo.
El dirigente socialista Soto observó que por su nivel de adherentes "el Frente Amplio tiene mucho más datos de los que puede usar" pero consideró "un mito" las dudas sobre el uso que se le dará a la herramienta.
"Si lo gestionás bien, vas al Cerro te reunís con los vecinos y sabes si te piden tal o cual cosa. Podes registrar reclamos y que te queden pendientes", narró.
Mahía señaló que prescindir de la herramienta informática sería "un error político". "Negarse a utilizar esta herramienta es quitarse posibilidades sobre un instrumento que desde el punto de vista político es muy importante", concluyó.
