Gestión de Martínez revisa y cambia decretos de Ana Olivera

Normas aprobadas en 2012 que nunca fueron reglamentadas; otras recientes que se ponen en reposo; y algunas "vetustas" que necesitan modificaciones inmediatas. Una de las primeras acciones del gobierno de Daniel Martínez en Montevideo es la de revisar y actualizar la normativa departamental, sobre todo en relación con asuntos que generan conflictos entre la comuna y los ciudadanos de la capital.

Luego del acto de asunción de Martínez, el pasado 9 de julio, el prosecretario de la IMM, Christian Di Candia había asegurado a El Observador que existía una necesidad de revisar la legislación departamental. Hay un "retraso importante de actualización normativa", afirmó el jerarca.

Según explicó Di Candia, la prioridad estuvo en revisar temas que tuvieran que ver con la convivencia y en donde "la ciudadanía tiene molestias con la administración". Con ese propósito, la intendencia creó diferentes comisiones que trabajan en la revisión e implementación de decretos sobre ruidos molestos y espectáculos públicos, deliverys y bicicletas. Además, según informó el semanario Brecha, la IMM también revisa un decreto sobre el etiquetado de alimentos transgénicos.

En cuanto a la normativa sobre espectáculos públicos, el prosecretario de la intendencia afirmó que está "vetusta y necesita actualizaciones". Di Candia explicó que no es viable, por ejemplo, que se pida el mismo tipo de permiso o exigencias para desarrollar una obra en el Teatro Solís que lo que se pide a una sala de teatro independiente en un barrio. Así se buscará contar con diferentes tipologías de permisos y que alguno de ellos pueda ser emitido por los municipios correspondientes.

Además, debido a los problemas de convivencia que generan los ruidos molestos –una de las inquietudes de los vecinos de Montevideo que más se destacó entre los reclamos a la Defensoría del Vecino en 2014–, la IMM busca reformar la normativa sobre la medición de los decibeles. Cuando una persona realiza una denuncia por ruidos molestos, por ejemplo de boliches, debe esperar a que el inspector llegue y realice una medición dentro de su domicilio. Uno de los posibles cambios es que la medición sea en la fuente que origina el sonido.

Por otra parte, la prosecretaría creó una comisión integrada por diferentes divisiones –tránsito y bromatología – y actores sociales para trabajar en la reglamentación de un decreto que regula a los deliverys. La norma fue creada en 2012 pero aún no se reglamentó. También se trabaja en la implementación de un decreto, también de 2012, sobre el estacionamiento de bicicletas. Además de reglamentarlos, "se van a promover los cambios que sean necesarios", dijo Di Candia.

Otro de las propuestas normativas aprobadas por la administración de Ana Olivera y que entró en revisión es la del etiquetado de los alimentos transgénicos. Si bien desde la IMM se afirma que el decreto está vigente, la aplicación del mismo fue suspendida.

La intendencia había dispuesto, a partir del 1° de enero de este año, que las empresas alimenticias debían etiquetar todos los productos que contuvieran más de 1% de elementos transgénicos y declarar la composición. Los productos tenían que presentar un sticker con una letra T negra sobre un triángulo amarillo, diseño similar al utilizado en otros países. "Se trata de una decisión política. No estamos pidiendo derogar el decreto, queremos revisarlo y ponernos a tono con el gobierno nacional", explicó a Brecha la directora de la división, Analice Berón. Dijo que los plazos se correrán "por tiempo indeterminado". El exdirector de Salud de la intendencia, Pablo Anzalone, consideró que la decisión fue "un retroceso".