La ministra de Industria, Energía y Minería, Carolina Cosse, anunció ayer en el Parlamento una batería de diez medidas para cambiar la realidad de la petrolera estatal ANCAP, cuyos números en rojo preocupan en el gobierno y generan duras críticas desde la oposición. Durante cuatro horas la jerarca se enfrentó a los cuestionamientos de los legisladores y detalló qué tiene pensado hacer el gobierno para frenar las pérdidas.
Según dijo, de ser exitosas las medidas a instrumentar, en 2015 las pérdidas de ANCAP podrían seguir pero a menor ritmo. Calcula que al cierre del presente ejercicio habrá US$ 50 millones de déficit, cuando el ente registró en 2014 uno mayor a US$ 324 millones. La deuda pasiva actual asciende a US$ 2.170 millones y la deuda fiscal llega a US$ 1.400 millones. La oposición cree que el resultado negativo en 2015 será mayor al que estima la ministra.
Según dijo la ministra Cosse, si las medidas anunciadas son efectivas, ANCAP cerrará 2015 con un resultado negativo de US$ 50 millones.
Participantes de la reunión explicaron a El Observador que si bien no se asumieron errores por parte de la ministra ni de los jerarcas del ente, en la comisión se habló de "necesarias mejoras de gestión" como una de las medidas a implementar.
Actualmente, ANCAP tiene reservas para cubrir la necesidad de energía derivada del petróleo durante 60 días. A partir de ahora el stock se va a reducir a casi la mitad, lo que permitirá al ente trasladar con mayor rapidez la baja del crudo a nivel internacional al consumidor final y repercutirá en el déficit fiscal del Estado. La ministra dijo que "el Ministerio de Industria está trabajando desde marzo en el manual de buenas prácticas para las empresas de energía", con el que se regulará el manejo del stock de ANCAP.
En cuanto a la deuda, según Cosse las estrategias para ello son "conocidas": "pesificar" o pasar a Unidades Indexadas la mayor cantidad de deuda posible y renegociar la de corto plazo a 5 años.
Además, se prevén otras medidas par que el ente sea "más cuidadoso con algunos gastos, con las contrataciones y sea más riguroso con el análisis de las inversiones", dijo la ministra.
La jerarca explicó ante la comisión -y reiteró a la prensa- que casi la mitad de los US$ 324 millones del déficit de 2014 del ente se explica por el aumento del precio del dólar. Según Cosse, "152 millones corresponden a la diferencia de tipo de cambio". El resto, unos US$ 170 millones, "corresponden a temas no incluidos en la paramétrica", como el precio del combustible. La ministra sostuvo que cuando "empiecen a rendir las inversiones que se hicieron", los resultados de ANCAP van a ser mejores pero que esos resultados no llegarán este año.
Tanto el diputado nacionalista Pablo Abdala como el colorado Walter Verri dijeron a El Observador estar "desconformes" con las explicaciones brindadas por la ministra en la mañana del miércoles. "Quedó demostrado que hubo imprudencia en cuanto al aumento de los gastos y eso no lo hace el tipo de cambio", dijo Abdala tras la reunión. "Se anunció un plan de medidas muy tímido que conducirían a un equilibrio que, en el mejor de los casos, daría pérdidas por US$ 50 millones", agregó.
Según dijo Abdala en rueda de prensa, la presencia de Cosse fue más bien "testimonial", ya que respondió de forma escueta, con evasivas y no asumió la defensa de la situación financiera de ANCAP.
Para Verri al gobierno le "falta admitir un problema de gestión", ya que no se trata de un problema de coyuntura únicamente. "No se entiende como se sigue perdiendo sistemáticamente a través de la diferencia cambiaria cuando hay mecanismos para paliar esa situación. Históricamente la situación ha sido así no importa el color gobierno que esté de turno", sostuvo el diputado.
Tras la reunión, Cosse dijo que el presidente de ANCAP "ha marcado que en el período 2011-2014 no fueron recogidos en la paramétrica de ANCAP 800 millones de dólares". Según pudo saber El Observador, José Coya manifestó en la comisión que la empresa pagó US$ 800 millones que no fueron trasladados al costo de su principal producto (los combustibles) por una decisión política del gobierno de José Mujica (2005-2010).
Además de la ministra, participaron de la comisión en Diputados los presidentes de ANCAP y UTE, José Coya y Gonzalo Casaravilla, la directora nacional de Energía, Olga Otegui, y el gerente de servicios compartidos de ANCAP, Hubert Arbildi, además de otros asesores.
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