Mundo > Migración

Industria del tabaco dinamiza la economía nicaragüense

Familias enteras se trasladan al norte del país en busca de trabajo
Tiempo de lectura: -'
06 de febrero de 2017 a las 05:00
Hace 17 años la familia de Isabel Ramos abandonó el empobrecido pueblo de Murra para trabajar en la vigorosa industria del tabaco en Estelí, en el norte de Nicaragua, donde se producen puros apetecidos en todo el mundo.

Ella, tres hermanos y sus padres encontraron en las tabacaleras nacionales y extranjeras que operan en la zona un medio de subsistencia que les genera cerca de US$ 900 al mes para sostener a la familia.
"Si no fuera por el tabaco estaría trabajando como cocinera",dice Ramos, de 31 años, mientras cuenta los 4.000 capotes –hojas para armar puros– que debe ordenar a diario en la empresa estadounidense Oliva Cigars.

"Son montones de gente" que huyen de la pobreza de sus comunidades para trabajar en las fábricas y plantaciones de tabaco de Estelí, explica la obrera, madre de dos adolescentes de 15 y 17 años.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco es "uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades" pulmonares y cardiovasculares.

Sin embargo, en Estelí asegura el sustento a miles de personas.

La industria tabacalera ocupa a unas 35 mil personas en el norte de Nicaragua, muchas veces a familias enteras.

La industria dinamizó el sector de la construcción, el comercio y el turismo de Estelí, convertido en uno de los centros económicos más importantes del país más pobre de América Central.

Muchos nicaragüenses han optado por mudarse de ciudad para ir a trabajar a Estelí, mientras que otros viajan a diario desde sus comunidades en ómnibus o viven en los albergues de las tabacaleras con sus familias.

Oportunidad laboral

"Aquí tengo chance de trabajar y reunir dinero para hacer una casa", señala por su parte Sergio Gadea, de 25 años, quien llegó hace un año con su esposa de 16 años desde el norteño municipio de Palacagüina.

En "mi familia somos ocho trabajando" en la industria, dice Naksara Ochoa, de 24 años, quien arma puros en una fábrica mientras escucha reggaetón junto a otros jóvenes que trabajan sin levantar la mirada.

"Nosotros queremos reunir dinero para hacer una casa y después irnos a nuestro pueblo", sostiene a su vez Yasmina Cruz, de 47 años, quien trabaja desde hace 18 años en una finca tabacalera con su marido.

Mientras que Moisés, de 27, originario del municipio aledaño de Condega, lleva cuatro años trabajando para ahorrar y estudiar ingeniería agropecuaria los fines de semana.

Producción en auge

Nicaragua es uno de los principales productores de tabaco en el continente, afirma a la AFP el presidente de la Cámara Nicaragüense de Tabacaleros, Juan Ignacio Martínez.

En la cadena productiva, que abarca el cultivo, curación, fermentación y fabricación artesanal de puros, participan 27 grandes tabacaleras de capitales estadounidense, europeo y nicaragüense, y 60 pequeñas.

Nicaragua exportó el año pasado cerca de US$ 200 millones en tabaco –10% más que en 2015– a 78 países, principalmente a Estados Unidos, señala Martínez.

El 90% de las exportaciones corresponden a puros prémium y 10% a tabaco en rama, de menor calidad.

"Muchas de las empresas que están acá son de familias que emigraron de Cuba", cuenta Martínez.
Afirma que en Nicaragua, "la calidad del suelo de origen volcánico es muy apta para cultivar cualquier cosa, especialmente la hoja de tabaco que crece grande, con mucho sabor y con un buenísimo aroma que gusta mucho al fumador".

Las plantaciones se cultivan en los frescos llanos de la cordillera que rodea a Estelí, donde cada año a mediados de enero se celebra el festival tabacalero Puro sabor, que este año reunió a 400 catadores y compradores.

"El puro nicaragüense tiene una receptividad muy grande, un aroma espectacular", dice a su vez el empresario de origen cubano Néstor Plasencia durante la festividad en su finca.

En tanto, el gerente general de la empresa Tabacos Cubanica, fabricante de la marca Padrón Cigars, el cubano estadounidense Gabriel Fernández, cuenta que su familia, originaria de Pinar del Río –la meca del tabaco cubano–, fue una de las primeras que se asentó en Estelí para desarrollar la industria.

En opinión del empresario, ese sector sobrevivió "al paso de guerras, ciclones, terremotos; de todo".

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...