La nube: una nueva fase en la tecnología para las empresas

Nube. Lejos del cielo, hoy día esa palabra también da nombre al lugar abstracto constituido por redes de computadoras. Para las empresas, la nube o cloud (por su equivalente en inglés) significa una nueva fase en el mundo de la tecnología, que habilita y facilita negocios.

"El mejor socio tecnológico para su negocio"; así se define la empresa de tecnología de la información (IT) nacional Urudata que, como lo ha hecho desde hace más de 30 años, está a la vanguardia de la tecnología. Y la nube no queda fuera de este concepto.

"Sin duda alguna la difusión masiva del cloud constituye hoy una realidad que ha transformado la dinámica empresarial de forma muy relevante", afirmó Luis Enrique Layerle, gerente comercial de la empresa –que es desde hace 20 años socia de Microsoft–, en diálogo con conversó con El Observador sobre esa extensión de la nube y el Internet de las Cosas como una herramienta esencial en los negocios.

La socialización y difusión de dispositivos y tecnologías personales hace que sea muy fácil para las personas acceder a la información que se necesita desde los mismos dispositivos, en cualquier momento y desde cualquier lugar. Esto lleva a que las empresas adecuen sus servicios, de modo que se consuman internamente y por los clientes. También que se use como plataforma de acceso y de cómputo elástica e ilimitada, y que se profundice a través del internet de las cosas, de modo que se orquesten en tiempo real los servicios hacia animales y máquinas, por ejemplo.

Por concepción, la nube es una plataforma elástica; permite fluctuaciones importantes en la demanda sin deteriorar la experiencia de cada usuario, se accede desde internet y desde cualquier dispositivo. Es una plataforma de autoservicio, brinda autonomía a los usuarios. Los proveedores de nube pueden hacer uso óptimo del pool de recursos, se mide permanentemente el servicio entregado y se cobra por uso. Esto hace que se socialice el acceso a la misma y a sus recursos y provoca una economía distinta a la previa, donde se cobra y paga por uso, y muchos servicios se tornan mucho más baratos inclusive para el usuario final. A nivel de salud e investigación, esa socialización abre las puertas a universalizar acceso a tratamientos y recursos de investigación, hasta hace poco impensados por la alta inversión requerida y las restricciones geográficas y de capacidad de procesamiento.

Este es un rubro que rompe el paradigma clásico de gestión. A los avances en trazabilidad y tecnificación en lechería preexistentes, se suman dispositivos, sensores, y servicios de nube, que llevan a un plano superior la profesionalización en la producción y gestión de ganadería y agricultura. Incluso involucramos tecnologías de Big Data.

Urudata cuenta con más de 30 años de constante desarrollo y sano crecimiento, cultivando el profesionalismo y agregado de valor a sus clientes, mediante la comprensión de sus necesidades y adecuación de sus propuestas de soluciones y servicios brindando el perfil más competitivo desde el rol de socio tecnológico que aspiramos a ocupar con todos nuestros clientes. Hemos desarrollado un mapa de socios tecnológicos de primerísima línea, líderes globales en sus áreas de soluciones y competencia, que nos permite resolver de la mejor forma la necesidades de tecnología de nuestros clientes. Microsoft, HP, HPe, IBM, Cisco, VMware, Citrix, Riverbed, Fortinet, Palo Alto, Symantec, McAfee, Red Hat, INTEL entre otros, son los socios estratégicos con quienes construimos la cadena de valor para nuestros clientes.

¿Qué implica ser socio de un gigante como es Microsoft?
Es un compañero de ruta de más de 20 años ya, y siempre ha sido un factor prioritario en la estrategia y desarrollo de nuestra empresa. Es hoy protagonista, impulsor y actor clave en la nube, mencionando a modo de ejemplo dos soluciones, su plataforma de Azure, líder mundial en nube pública, y O365 solución de productividad personal y empresarial líder global también.

Se pueden distinguir dos enfoques: uno a nivel de optimización y mejora de los procesos de negocio, y otro más disruptivo y menos convencional, que aborda nuevos escenarios. Desde un punto de vista práctico, desde el cómo, creo que la nube debe estar en la agenda de consideración estratégica de cada negocio.

Este es un punto interesante. El concepto de nube produce una sensación de mayor riesgo e incertidumbre en primera instancia. La infraestructura y datos dejan de estar dentro de la empresa y quedan físicamente bajo responsabilidad de proveedores de nube. Lo que hay que analizar, entonces, es qué reglas de seguridad debe cumplir este nuevo arreglo, en términos de confidencialidad, integridad, autenticidad y disponibilidad.

Esto provoca una mayor maduración de las políticas de la empresa en ese sentido, y se puede observar que las soluciones en la nube tienen bastante más seguridad de la que a priori se piensa, que es viable operar de forma más segura e incluso con mayor disponibilidad que en los escenarios previos. Simplemente que estos aspectos así como se cuidan en las redes convencionales, deben cuidarse en la nube con las herramientas y soluciones idóneas, y con las auditorías correspondientes.

La nube ofrece un potencial de transformación importante en los distintos procesos de negocio, que merece ser analizado con el objetivo de migrar y desarrollar nuevas soluciones. Trabajar con la nube significa poner a disposición de las personas y empresas, alrededor del mundo, recursos de datacenter y networking, de plataforma y de software, en una modalidad atractiva e inmediata, que permite incluso el pago por uso. Y, si bien el potencial es enorme, en el mercado uruguayo aún se encuentra todavía inexplorado. Urudata trabaja de manera activa para desarrollar y dar preponderancia a iniciativas de cloud para clientes en industrias muy diversas que van desde forestal, logística, producción, service providers, entre otras. Con estas nuevas iniciativas logra transformar el modelo de negocios.

El potencial de estas herramientas es muy grande ya que permite una gran exposición y masificación de procesos propios de negocio que agregan valor específico a sus clientes y socios. Ejemplos usuales de esto son formas de pago como tarjetas de débito y crédito. Asimismo permite desarrollar servicios y mejorar los procesos de negocio, llevando los mismos al cloud y usando sus nuevas tecnologías asociadas de manejo masivo de datos, de análisis, de mobile, del internet de las cosas. Esto tiene impacto en negocios tan diversos como los servicios de logística, de transporte, de producción, servicios médicos, entre otros.

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