Un informe elaborado a pedido de la Justicia
al que accedió el diario argentino La Nación, incluye el pago que se le hizo a
Lázaro Báez, empresario afín a los Kirchner y sospechoso de lavado de dinero, asociación ilícita y encubrimiento, por las obras de construcción que le fueron asignadas.
Según ese documento, desde el año 2003 –cuando accedió Néstor
Kirchner al poder-, las empresas de Báez recibieron más de $ 8000 millones (cerca de US$ 870 millones) en contratos de obras públicas. Esto a nivel nacional, pues no se incluyen en el reporte los datos de las construcciones que se negociaron a nivel provincial.
El informe fue pedido por el juez Claudio Bonadio, que investigaba al empresario hasta que el magistrado fue removido. La intención de Bonadio al solicitar esta información era usarla para verificar su hipótesis de que el gobierno giraba dinero a Báez y que este se lo pasaba a los Kirchner cuando alquilaba habitaciones en los hoteles del matrimonio. Báez pagaba por piezas y salones que nunca eran ocupados.
El detalle de las obras encargadas al sospechoso muestra su cantidad y el valor de cada una de ellas. Pero además revela situaciones poco claras. Por ejemplo, en 2006 se le asignaron unos US$ 15 millones (a la cotización oficial actual) para obras en un paso fronterizo con Chile que continúan "en ejecución".
Las empresas de Báez recibieron más de $ 8000 millones (cerca de US$ 870 millones) en contratos de obras públicasAsí, "en ejecución", hay al menos tres obras más: 42 kilómetros de una ruta que comenzó a repararse en 2008 y dos tramos de 75 kilómetros que están siendo arreglados desde 2011. Se pagó casi un millón de dólares (0,85) por cada uno de estos 192 kilómetros de obras inconclusas, el total asciende a US$ 165 millones.
En Uruguay, por ejemplo, en junio
se concedió una obra vial bajo el formato de Participación Público-Privada (PPP) a un consorcio integrado por la española Sacyr y Grinor (propiedad de la uruguaya Saceem). Las empresas indicaron que destinarían unos US$ 100 millones para la reparación de 179 kilómetros en las rutas 21 y 24 a lo largo de tres años. Cada kilómetro vale medio millón, la mitad que en
Argentina.
En Uruguay la Justicia investiga presunto lavado de dinero en la
compra de un predio en Punta del Este, que fue adquirido por una sociedad anónima vinculada a Báez. Por otra parte, se comprobó que Daniel Pérez Gadín, contador del empresario,
es el dueño del campo El Entrevero, un predio ubicado cerca de José Ignacio, que fue vendido a un precio superior al del mercado.
No figuran en los US$ 870 millones asignados en obras del Estado a Báez el dinero que se le otorgó para obras en las distintas provincias del país. Por ejemplo, en Santa Cruz, una de sus empresas recibió USS 8,7 millones para construir una ruta que no tiene destino, pues termina en medio de la estepa patagónica, según mostró el programa televisivo de Jorge Lanata en 2013.