Los looks de los Rolling Stones en concierto

El imponente escenario -que montaron los más de 60 técnicos de la producción y cuya estructura total alcanzó los 18 metros- fue acompañado por un despliegue de vestuario que se lució más en Mick Jagger que en cualquiera de los otros músicos.

No se conocen detalles respecto a quiénes fueron los encargados de diseñar los trajes de los Stones en esta oportunidad. En ocasiones anteriores era la novia de Jagger, L'Wren Scott -quién se suicidó en marzo de 2014- la que se encargaba de confeccionar el vestuario.

Jagger comenzó el espectáculo vistiendo un conjunto de chaqueta y camisa violeta en tela satinada.

El vocalista lució también una chaqueta con un estampado tipo animal print de tigre.

En un momento del show, Jagger eligió una chaqueta blanca y negra con un estilo que alude a las típicas camperas que las fraternidades usan en las universidad de Estados Unidos, el mismo diseño que las chaquetas de los jugadores de béisbol.

Para la presentación de la canción Sympathy for the Devil, el vocalista se vistió con una especie de tapado muy voluminoso de color rojo. Dicha prenda fue acorde con el relato de la canción que habla de un personaje anónimo que es el responsable de todos los actos de maldad en el mundo.

Ya para cerrar el show, Jagger vistió de rojo con una chaqueta que brilló ante los focos del escenario deslumbrando casi tanto como el artista.

El guitarrista comenzó el show con una camisa azul de tela satinada y grandes botones negros. En la cabeza vistió un pañuelo rojo, una prende distintiva del músico.

El segundo y último cambio de vestuario de Richards fue una camisa de un color verde intenso y que mantuvo hasta el final del show. El pañuelo rojo lo mantuvo durante todo el concierto.

El guitarrista vistió dos remeras, una roja y otra azul con estampados grandes.

Charlie Watts

El baterista vistió únicamente una remera blanca y no cambió en todo el show a pesar de la transpiración por las intensas temepraturas.