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Los mejores momentos del show de Peñarol
El himno del Campeón del Siglo #Peñarol pic.twitter.com/ab2Q8RZnBS
La fiesta en el estadio Campeón del Siglo comenzó pasadas las 21:00 horas. El espectáculo estuvo a la altura de las circunstancias y logró, con un gran despliegue de artistas, captar la atención de las más de 30 mil personas que colmaron el estadio aurinegro.
Mapping histórico
El inicio del show estuvo a cargo de Jorge Drexler y Jorge Bolani, encarnando al personaje de Giovanni Crosa, que llevó la narrativa del show. En el medio de la cancha, una escenografía que simulaba la vieja estación de tren del barrio Peñarol, fue el inicio de un recorrido por la historia del club aurinegro.
Las grandes hazañas, goles y glorias del equipo mirasol, fueron repasadas con un mapping que se proyectó sobre toda la cancha. A medida que se fueron sucediendo, un encendido Raúl Castro iba narrando las victorias aurinegras marcadas en la historia.
Gigantes en la cancha
El baile dijo presente en varios momentos de la noche con los 550 artistas que estuvieron en escenas, dirigidos por Martin Inthamoussú.
La entrada a la cancha de una gran comparsa de tambores con bailarines y la locomotora humana que formaron varios artistas fueron algunos de los atractivos en el inicio del show. Pero sin duda el momento que arrancó más flashes fue la salida de las cuatro marionetas gigantes que dieron la vuelta olímpica en el estadio, representando a los cuatro grandes capitanes de la historia de Peñarol.
Los grandes muñecos, vestidos con diferentes indumentarias de Peñarol, eran trasladados por una grúa y siete personas.
Popurrí musical
El show en el Campeón del Siglo estuvo marcada por la versatilidad de los artistas que allí se presentaron. Un escenario móvil que recorrió todo el estadio, parando en cada tribuna, tuvo primero a Hugo Fattoruso interpretando el clásico de Los Shakers, Rompan todo.
Luego vino el turno de los hermanos Rada (Julieta, Matías y Lucila), que le pusieron más rock al festejo interpretando otro clásico: Negro, de la mítica banda uruguaya de la década de 1970 Totem, de la que Rúbén Rada era parte.
El escenario continuó rodando y Alberto "Mandrake" Wolf junto a Pinocho Routín interpretaron Amor profundo, clásico histórico del líder de los Terapeutas versionado alguna vez por Jaime Roos. Luego vino el turno del argentino Gustavo Cordera (ex Bersuit) que, vestido de murguista, saludó a la hinchada aurinegra y les regaló Murguita del sur. "Bendiciones, buen fútbol y alegría para ustedes", dijo antes de bajarse del escenario.
Y el cierre esperado por muchos de los presentes estuvo a cargo de otro argentino: Fito Páez. Cantó tres de sus clásicos y logró el coro general del Campeón del Siglo. Se sucedieron Y dale alegría a mi corazón, A rodar mi vida y El amor después del amor (ésta última a dúo con Julieta Rada). Agradeció, cantó acompañado solo por su piano y hasta se dio el gusto de dirigir a la barra aurinegra que tomó prestada una de sus melodías e interpretó uno de los clásicos cánticos de aliento.
¿La sorpresa de la noche? La presentación del ídolo aurinegro, Fabián "Lolo" Estoyanoff y la cantante de cumbia Majotón, que interpretaron el tema Somos tu y yo, que ambos lanzaron recientemente. "Esta es nuestra casa, carajo. Sueño cumplido (...) De alguna manera tenía que estar acá... Amo a Peñarol" dijo el Lolo y lo ovacionó el estadio entero.
La yapa
El cierre del espectáculo estuvo cargado de simbolismo. Lejos de las grandes figuras y los ídolos que fueron recordados durante el show, Peñarol decidió cerrar su festejo con los planteles de inferiores. Un show de fuegos artificiales fue el momento cúlmine de la noche, que cerró con un mensaje que apuesta a la paz en los escenarios deportivos: "Violencia nunca más. Hoy comienza otra historia", se proyectó sobre la cancha del estadio aurinegro.
